El número de muertos por las lluvias torrenciales y desbordamientos en España se elevó a 158, con la mayoría de fallecidos en la comunidad de Valencia. Decenas de personas continúan desaparecidas, mientras sus familiares las buscan sin descanso casi 48 horas después del desastre. La única esperanza para los afectados es que el temporal conocido como “gota fría” comienza a disminuir, con lo que se espera que la situación no empeore en las próximas horas.
El presidente Pedro Sánchez, quien se trasladó a las zonas afectadas, informó que el gobierno movilizó más de 1,200 militares y expertos en rescate para salvar a los desaparecidos, muchos de los cuales podrían estar atrapados en sus viviendas o refugiados en azoteas.
Las labores de rescate se ven obstaculizadas por la interrupción de los servicios de electricidad y telefonía en las áreas afectadas, esto dificulta la comunicación para pedir ayuda. Además, varias carreteras permanecen intransitables por los daños y la acumulación de vehículos arrastrados por las inundaciones.
La alerta roja se ha activado en Cataluña debido a la inminente llegada de más lluvias torrenciales causadas por el fenómeno de la gota fría, que algunos expertos vinculan al cambio climático y al calentamiento del mar Mediterráneo.
Seguiremos informando.