El gabinete de seguridad del Gobierno de México difundió un video sobre la captura de Ovidio Guzmán López, hijo del narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán, el pasado 17 de octubre en Culiacán, Sinaloa, quien fue liberado posteriormente. Además, dieron a detalle como se llevo a cabo el operativo y los hechos que se suscitaron ese día en la capital sinaloense.
El secretario de la Defensa, Luis Cresencio Sandoval, presentó la relatoría del operativo para detener a Guzmán López, considerado uno de los principales delincuentes que mueven drogas a Estados Unidos en el ámbito de metanfetaminas y fentanilo. En conferencia de prensa, el titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) indicó que previo a su captura, Ovidio tuvo comunicación, vía telefónica, con uno de sus hermanos.
Desde el pasado 2 de abril de 2018, la Corte Federal de Columbia, Estados Unidos, gira una orden de aprehensión del hijo del Chapo Guzmán por asociación delictuosa para la distribución de drogas. A Ovidio se le acusa de ser de los principales productores y distribuidores de metanfetaminas y de fentanilo en México y Estados Unidos. El 13 de septiembre de 2019, piden la detención provisional con fines de extradición a México.
Los días previos al operativo se recibió la denuncia al Ministerio Público para la detención de Ovidio, así como el inicio de la carpeta de investigación en su contra por diversos delitos. Desde el 8 de octubre la Guardia Nacional, y la Secretaría de la Defensa Nacional recibieron la solicitud de colaboración para realizar este operativo. Durante los días siguientes, comenzaron con el reporte de los inmuebles y personas relacionados, así como el equipo con el que contaban, en relación al presunto delincuente que pretendían detener.
En un principio, planeaban realizar dos círculos de seguridad, uno interno que cubriera la cuadra donde se encontraba la casa de Ovidio Guzmán y otro que rodeara las calles principales aledañas del fraccionamiento donde se encontraban. Posterior a esto, tomarían el bulevar Pedro Infante en dirección al aeropuerto de la ciudad, un recorrido que tomaría aproximadamente 25 minutos, y de esta forma asegurar al detenido.
Sin embargo, no salió como esperaban; el dispositivo externo no logró ocupar por completo sus posiciones ya que la casa que ya estaba bajo vigilancia era protegida por el crimen organizado. El perímetro externo no alcanzó a ocupar sus posiciones para poder sacar a tiempo al presunto culpable.
Ese día, las tropas partieron a la casa de Ovidio a las 14:10 horas y comenzaron el operativo en el lugar a las 14:30, al ingresar, 20 minutos después, comienzan a ser agredidos por civiles armados que resguardaban la casa. Aproximadamente a las 15:15, Guzmán López sale al estacionamiento del inmueble y se entrega al escuadrón que pretendía detenerlo; en ese momento se encontraba hablando por teléfono con su hermano, Archivaldo Iván Guzmán Salazar, a quien pedía que detuviera las agresiones contra los militares.
En las imágenes difundidas este miércoles por las autoridades federales se puede observar al hijo de “El Chapo” hablando por un teléfono celular y se le escucha decir: “Ya paren todo oiga, ya paren todo, ya me entregué, ya paren todo por favor… Dígales que ya se retiren, ya tranquilos, ya ni modo”.
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Desde las 15:45 comenzaron las agresiones contra militares y civiles en distintos puntos de la ciudad de Culiacán, principalmente en las bases. Los delincuentes comenzaron a tomar camiones urbanos y a robar vehículos para comenzar a bloquear las principales avenidas. Una hora después, miembros de la delincuencia organizada comienzan a rodear y a atacar el Campo Militar y la Unidad Habitacional Militar; en esta última dispararon contra los edificios, niños se encontraban jugando cuando llegaron y empezaron a lanzar a granadas. En las avenidas principales, agredieron a los refuerzos que se dirigían a donde realizaban el operativo.
En los alrededores de la ciudad, detuvieron a los convoys militares en Limón Ramos y en la Caseta “costa Rica”, la cual resguardaba pipas de gasolina que pretendían entrar a la ciudad. Además, detuvieron a militares que se encontraban en la estación Sufragio del ferrocarril. Tras varias horas de enfrentamiento en la ciudad, a las 19:17 horas fue liberado Ovidio Guzmán junto con cuatro personas más que se encontraban retenidas en el domicilio, y las tropas retrocedieron por orden del presidente.
Se estima que participaron más de 300 personas del crimen organizado en las agresiones a los militares y policías. Se sabe que el Cártel de Sinaloa ofreció dinero a otros grupos delictivos en Chihuahua, Sonora y Durango para que atacaran a militares en sus respectivos estados. Los criminales contaban con camionetas blindadas, carros robados en ese momento, camionetas pickup con metralletas, camiones de volteo, armas de todo calibre y radios de comunicación. En determinado momento, intentaron sobornar al comandante de la IX Zona Militar con 3 millones de dólares para que dejara en libertad a Ovidio.
Por parte de las fuerzas oficiales, participaron más de 200 elementos, entre militares, Policía Federal, Estatal y Municipal. Además, tenían listos helicópteros de ataque y reconocimiento, aparte de las camionetas blindadas en las que se estuvieron moviendo durante los ataques. Al respecto, el secretario de Seguridad Ciudadana, Alfonso Durazo, recalcó que el Estado cuenta con la fuerza para dar una guerra sin cuartel a la delincuencia, pero el costo de responder de forma violenta sería muy elevado.
En total, reportaron el fallecimiento de ocho personas y 19 más heridos, entre agentes de seguridad pública y militares. Todo reporte será entregado a la Fiscalía General de la República y al Poder Legislativo para que lo analicen.
Con información de Notimex.