Este 18 de marzo, México conmemora el 87° aniversario de la histórica expropiación petrolera, un hito que marcó un antes y un después en la historia económica y política del país. En 1938, el presidente Lázaro Cárdenas del Río tomó la decisión de nacionalizar la industria petrolera, enfrentándose a las grandes empresas extranjeras que controlaban los recursos del país.
La expropiación fue un acto de soberanía que permitió a México recuperar el control de su principal recurso natural y sentó las bases para la creación de Petróleos Mexicanos (PEMEX), una de las empresas más importantes en la historia de la nación.
A 87 años de este acontecimiento, la expropiación sigue siendo un símbolo de la lucha por la independencia económica y un recordatorio de la importancia de proteger los recursos nacionales para el bienestar del pueblo mexicano. La fecha continúa siendo motivo de reflexión sobre los logros y desafíos en la gestión del petróleo en el país.
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