Aunque diferentes sectores de gobierno y empresas hacen su lucha por vestir con luces y decorar de forma navideña, los comerciantes ambulantes invaden las calles e impiden disfrutar del colorido Centro Histórico durante la época decembrina.
A diferencia de los locales ya establecidos que pagan su renta durante todo el año, los vendedores informales hacen «su agosto» en pleno mes de diciembre, ya que muchos aprovechan la falta de autoridad de Comercio Municipal para sacar la venta en tan solo un par de horas.
Si bien hay algunos policías en las calles más transitadas como Miguel Hidalgo, Álvaro Obregón, Ignacio Zaragoza o Guajardo, los elementos de seguridad ni sé inmutan al ver las decenas de puestos que llegan a lo largo del día y se montan a sus anchas en donde les dé la gana.
Lo anterior ha generado el descontento de los comerciantes formales, quienes durante todo el año se esfuerzan para sacar sus negocios a flote y ven como los vendedores informales se aprovechan de la poca visión y capacidad de la titular de Comercio Municipal, Beatriz Benavente.
Incluso la mala administración en la dependencia ha ocasionado en semanas pasadas broncas y pleitos entre los mismos comerciantes.
Para desgracia de los negocios potosinos, la expectativa entre ellos es que conforme se acerquen los días 24 y 25 de diciembre la demanda aumente y ello hará que más comerciantes informales salgan a frustrar las ventas de los locales ubicados en el Centro Histórico.