Todos conocemos que meterse a tandas es una forma de ahorrar dinero, muchas personas optan por hacerlo porque se les hace una manera más sencilla de guardar ingresos. Ahorrar para muchos no es fácil pues terminan cediendo a la tentación de saber que tienen un dinero guardado en alcancías o bien debajo del colchón, pero meterse a tandas parece ser más fácil pues tiene la mentalidad de Qué es un dinero que debes y cuando toque tu turno de recibir todo el dinero podrás disfrutar del trabajo que te costó obtener esa cantidad.
¡Pero ojo!, que por más lógico que suene estar en tandas podría traerte problemas con el servicio de administración tributaria (SAT). El método de ahorrar dinero por tandas, es muy bueno como cualquier otro, existe un riesgo que puede traerte problemas debido aquel los pagos qué haces son en efectivo y se guardan por el que organizó la tanda. Lamentablemente esto puede verse cómo algo sospechoso por parte del SAT.
Recordemos que las tandas consisten en dar pagos semanales durante un cierto tiempo, este va dependiendo de los números en los que se distribuyó los pagos. Y al final siempre te tocará qué te entreguen lo que fuiste dando y esto no tendrá una forma de comprobar de dónde provino el dinero que recibiste.
La situación se vuelve más riesgosa cuando el dinero que ahorraste por medio de una tanda lo utilizas para pagar deudas de tus tarjetas o comprar cualquier producto, ante esto a el SAT seria extraño de dónde provino el dinero que supera tus ingresos comprobables. Por ello debes de tener en cuenta en qué consideras gastar el dinero qué obtuviste a través de una tanda.
Si recomienda el dinero que tengas por la tanda no se una gran cantidad, recuerda que desde el 2014 el SAT y la Comisión Bancaria y de Valores (CNBV) se han Unido para acabar contra la evasión de impuestos. Por ello los bancos están obligados hacer constar a las autoridades de los depósitos que se hacen a las cuentas de estos bancos.