En épocas recientes, la actividad sísmica del país y el mundo ha ido en aumento. La tierra sufre movimientos constantes lo que provoca daños materiales y en ocasiones pérdidas humanas. Hoy, vemos estos sucesos hasta en puntos que se encuentran fuera del Cinturón de Fuego del Pacífico (zona con más actividad sísmica), un ejemplo es el estado San Luis Potosí en donde se han presentado estas anomalías en las Zonas Centro y Media últimamente.
De acuerdo con cifras del Servicio Sismológico Nacional (SSN), cada día hay unos 15 sismos inferiores a los dos grados. En parte, esto sucede porque México se encuentra en una zona en la que se conectan cinco placas tectónicas: la de Norteamérica, Cocos, Pacífico, la de Rivera y la del Caribe.
Victor Espindola, jefe de analistas del SSN, mencionó que cada placa se mueve de manera aleatoria y que, cuando se encuentran, liberan una gran cantidad de fuerza, lo que genera el movimiento y deformación de la corteza terrestre.
El jefe de analistas también resaltó que estos fenómenos pueden considerarse, hasta cierto punto, comunes en estos años, ya que se tiene conocimiento de ellos gracias a la mejoría de los instrumentos tecnológicos de medición que permiten mantener actualizadas las estadísticas de los sistemas.
Cabe aclarar que no es posible prever estos eventos naturales, pero los sistemas pueden alcanzar a detectarlos, al menos, segundos o minutos antes de que ocurran, por eso es importante que las personas estén atentas a las alertas y consejos que ofrece Protección Civil en las ciudades con riesgo.
Seguiremos informando.