A Leopoldo Stevens, el octogenario titular de la Secretaría de Obras de Gobierno del Estado, ya se le va la onda, otra vez se le olvidó pagar el recibo de la luz que activa el interruptor para izar la bandera monumental en la Zona Universitaria, por lo que ayer lunes 24 de junio no lució en lo alto el lábaro patrio.
El responsable de realizar los honores a la bandera en el asta monumental, ubicada en la Zona Universitaria, Roberto González, director de Gobernación, no sabía qué hacer, ya tenía todo listo para los honores: policías, funcionarios, militares y hasta la bandera que ya estaba sujetada al cable que la levantaría, pero el interruptor no funcionó.
“Bájale a la palanca”, “chécale la pastilla”, “enchúfale tu celular” “haz algo”, gritaba el rígido funcionario en espera que alguien, con una barita mágica, hiciera que el interruptor encendiera. Por más que el encargado bajó y subió el interruptor, la bandera no subió. SEDUVOP no pagó la luz, fue la conclusión.
Roberto González, acostumbrado a tratar con antreros que tienen el dinero por delante, pensó a quién multar por semejante bochorno, a quién clausurar por la omisión y cómo sacar tajada por no cumplir con los honores a la bandera. No hubo quién pagara los platos rotos, pues Leopoldo ya está viejito y nomás le alcanzan las fuerzas para pellizcarle al recurso para obras públicas.
Aprovechando que el clima está lluvioso, intentaron decir que no se izó la bandera monumental por precaución para que no se rompiera con las fuertes ráfagas de viento.
