
Ciudad Valles, S.L.P. – La negligencia institucional volvió a golpear de lleno a los pacientes de hemodiálisis del ISSSTE en Ciudad Valles, quienes este lunes enfrentaron una situación crítica: se quedaron sin su tratamiento vital debido a la falta de insumos básicos en la clínica.
Desde las seis de la mañana, maestros jubilados y otros derechohabientes comenzaron a llegar al hospital para sus sesiones programadas a las siete. Sin embargo, en lugar de recibir atención, se toparon con la negativa del personal, que, impotente, les informó que no podrían ser atendidos. Pacientes que llegaron de madrugada vieron pasar las horas hasta el mediodía sin ser conectados a las máquinas, poniendo en grave riesgo su vida y su tratamiento médico.
Inicialmente, trascendió que la suspensión del servicio se debía a una supuesta falta de agua. No obstante, personal del mismo hospital confirmó que la verdadera causa fue la ausencia de insumos esenciales, como las bolsas para diálisis, cuya falta ya había sido reportada días atrás sin que se tomaran medidas preventivas.
Lo más indignante es que apenas hace una semana, el delegado de Bienestar en San Luis Potosí, Guillermo Morales, entregó recursos millonarios a través del programa La Clínica es Nuestra (LCN) para la mejora de hospitales y centros de salud. El ISSSTE de Ciudad Valles recibió 800 mil pesos, el de Ébano 400 mil pesos, y el de Tanquián 600 mil pesos, fondos que supuestamente serían destinados a infraestructura, equipamiento y abasto de medicamentos. Sin embargo, la cruda realidad alcanzó a los pacientes este lunes: ni insumos básicos hay para salvarles la vida.
Esta falla no es un hecho aislado. Los pacientes denuncian que episodios como este han ocurrido en múltiples ocasiones, afectando directamente a más de 60 personas que dependen de su tratamiento de hemodiálisis para mantenerse con vida.
La omisión, la desorganización y la falta de sensibilidad de las autoridades del ISSSTE ponen una vez más en entredicho el sistema de salud pública, dejando claro que para muchos, la negligencia institucional es tan mortal como la enfermedad que combaten día a día.
Seguiremos informando.