
El equipo Rojos de San Luis Potosí sucumbió ante el conjunto de los Lobos de la Universidad Autónoma de Coahuila, con marcador de 21 puntos a cero, en duelo de la jornada 7 de la temporada 2025 de la ONEFA-Conferencia Occidente.
En su primer año de los Rojos en la Organización Nacional Estudiantil de Fútbol Americano (ONEFA), el plantel cuenta con una mayoría de jugadores novatos que se enfrentan a los programas más consolidados de la región.
“Perder nunca es cómodo, pero hoy entendimos lo que se necesita para competir de tú a tú con programas consolidados. El crecimiento es visible y la madurez está llegando más rápido de lo previsto.”, comentó Carlos Briones Zermeño, Head Coach.
“Cada bloqueo y cada tacleada forman parte de un aprendizaje acelerado; estos partidos nos preparan para el futuro inmediato de la organización.”, señaló el entrenador del equipo.
PRÓXIMO COMPROMISO-ÚLTIMO JUEGO EN CASA
El siguiente encuentro de los Rojos de San Luis será el próximo sábado 26 de abril a las 16:00 horas, en el campo de la Universidad Politécnica de San Luis Potosí, en el que será el penúltimo juego de la temporada regular y última presentación en casa.
La organización invita a la afición potosina, a los amantes del fútbol americano y a las categorías infantiles Rabbits, Babys, Ponys, Hornets y Falcon’s a llenar las gradas de rojo en el cierre local de la campaña 2025. Con el impulso de su gente, los Rojos buscarán repetir la victoria lograda la temporada pasada ante los universitarios tapatíos
En su año de debut, los Rojos de San Luis Potosí han consolidado avances clave en estructura táctica, fortaleza mental y cohesión de grupo. La directiva y el cuerpo técnico reconocen que los resultados en el marcador no han acompañado aún al esfuerzo realizado, pero subrayan que el auténtico progreso se mide en disciplina, aprendizaje y temple competitivo.
El Head Coach Carlos Briones remarca que el proyecto juvenil de los Rojos está pensado a largo plazo y se han alcanzado los siguientes puntos, se han reducido los puntos permitidos por juego desde la Semana 1; el equipo ha mejorado su eficiencia ofensiva y defensiva pese a la alta proporción de debutantes; La adversidad enfrentada fortalece la identidad y sentará las bases de un futuro ganador.
“El 26 de abril no es solo un partido: es la oportunidad de demostrar cuánto hemos crecido y de empezar a fabricar la victoria con el empuje de nuestra gente”, concluye el estratega.