Los astronautas de la NASA, Butch Wilmore y Suni Williams, están finalmente en su camino de regreso a la Tierra, poniendo fin a una misión espacial que originalmente debía durar solo ocho días. El viaje, que comenzó el 5 de junio de 2024 a bordo de la nave Starliner de Boeing, se convirtió en una odisea inesperada debido a una serie de problemas técnicos.
La misión de Wilmore y Williams, lanzada desde Florida, tenía como objetivo probar los sistemas de la Starliner y llevar a cabo experimentos en la Estación Espacial Internacional (EEI). Sin embargo, al llegar a la EEI el 6 de junio, se detectaron fallos en la nave: fugas de helio en el sistema de propulsión y problemas con algunos de los propulsores. Estos contratiempos llevaron a la NASA y a Boeing a iniciar un análisis detallado, lo que retrasó el regreso de los astronautas repetidamente.
A pesar de los esfuerzos para solucionar los fallos, la situación no mejoró. El 24 de agosto de 2024, la NASA decidió que la Starliner no era segura para traer de vuelta a Wilmore y Williams. Como resultado, la nave regresó vacía a la Tierra el 6 de septiembre de 2024, aterrizando en Nuevo México. Este incidente dejó a los astronautas “varados” en la EEI, sin un medio de transporte para su regreso.
El regreso de Wilmore y Williams se había previsto inicialmente para febrero de 2025, pero nuevos retrasos continuaron ocurriendo. Finalmente, hoy, 18 de marzo de 2025, los astronautas han comenzado su viaje de regreso, tras pasar más de 9 meses (aproximadamente 287 días) en el espacio, mucho más tiempo del originalmente planeado.
Esta misión, que comenzó como una prueba corta de la Starliner, se ha transformado en una de las experiencias más largas y desafiantes para los astronautas de la NASA, quienes, al final, estarán regresando a casa después de una prolongada estancia fuera de la Tierra.
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