Desde hace varios días, la Huasteca Potosina enfrenta una ola de incendios forestales que han consumido extensas áreas de vegetación y han puesto a prueba la capacidad de respuesta de cuerpos de emergencia y brigadas especializadas. El punto más crítico se vive en Ciudad Valles, donde el sábado 15 de marzo las brigadas continúan con intensas labores para sofocar los incendios en distintas zonas.
En Valles, los siniestros han afectado Miravalles, El Abra, Antiguo Montecillos, Las Pitas, Ojo de Agua en la Cordillera Tenek, camino a Chantol, Citlalmina, Tanzacalte, Ignacio Zaragoza (a la altura de Casas Viejas), Estación Crucitas y Estación 500. A pesar del arduo trabajo de los brigadistas y voluntarios, los incendios en el ejido Ignacio Zaragoza, Huertas y Ojo de Agua, además de los Otates la parte que colinda entre Valles y Aquismón siguen activos, representando una amenaza para la población y el ecosistema.
Otros municipios también han sido afectados, aunque en estos puntos los incendios ya han sido controlados. En Tamuín se reportaron 12 incendios en zonas como El Aserradero, Fortaleza, La Primavera, La Cuaya, Antiguo Tamuín y El Caracol. En Tanquián, el fuego afectó el Barrio Progreso, mientras que en Coxcatlán, las llamas se propagaron en Palzoquillo, San Pablo y Tioamel. San Vicente también sufrió incendios en la comunidad de Cuayalab. Tamazunchale registró siniestros en Vega Larga, Tenexco y Xicotla, mientras que en Ébano, las zonas de Ajinche y el fraccionamiento Tecnológico también fueron afectadas.
La magnitud del desastre ha requerido la movilización de diversas corporaciones, incluyendo Protección Civil, la Comisión Nacional Forestal (Conafor), el Grupo ERCED, la SEDENA, Protección Civil Estatal, así como voluntarios de municipios vecinos, quienes han trabajado sin descanso en condiciones extremas para evitar que el fuego se propague a zonas habitadas.
A pesar de los esfuerzos, las condiciones climáticas, con altas temperaturas y vientos variables, han dificultado las labores de contención. Hasta el momento, no se ha informado sobre el total de hectáreas afectadas ni los daños materiales, pero la emergencia sigue latente.
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