Ciudad Valles, S.L.P.- En un impactante suceso que resalta la urgencia de abordar la violencia de género, Nataly N. vivió una aterradora experiencia a manos de su esposo, Francisco, quien, en lugar de protegerla, se convirtió en su agresor. El pasado lunes, en el fraccionamiento El Consuelo, en la calle Jesusita entre Julieta y Elvira, Nataly fue víctima de agresiones físicas que la dejaron con una fractura en la nariz y múltiples contusiones. Aislada y sin poder comunicarse, su esposo le quitó el celular y la encerró en un cuarto, pero su determinación la llevó a encontrar una salida.
Fue hasta la noche del martes que Nataly logró escapar y pedir ayuda a su vecina, quien al ver su estado alarmante, contactó a las autoridades. La llegada de la Guardia Civil Estatal fue crucial; Nataly no solo solicitó la detención de su agresor, sino también el rescate de su pequeño hijo, quien se encontraba en la misma situación de riesgo. Intervino también la Unidad de Atención a Víctimas de Violencia de Género, que brindó apoyo inmediato a la joven.
Ambos fueron puestos a resguardo por el Instituto de las Mujeres del Estado de San Luis Potosí (IMES) y la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (Ceeav). Este miércoles, madre e hijo fueron trasladados a la fiscalía para presentar su denuncia y recibir atención médica, así como medidas de protección.
Este caso se presenta en un contexto alarmante, a pocos días del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, y en un año que ya ha registrado dos feminicidios en Ciudad Valles. La historia de Nataly es un recordatorio de la necesidad de actuar y apoyar a las víctimas de violencia, así como de la importancia de crear conciencia sobre esta problemática que afecta a tantas mujeres en nuestra sociedad.
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