Si las hojas de tus plantas están perdiendo su vibrante color verde y se tornan amarilla, no hay de que preocuparse. El fenómeno conocido como clorosis es una señal de que algo no anda bien en el entorno y aquí te dejamos algunos remedios caseros para ayudar a solucionar su tono.
De acuerdo a diversos expertos en jardinería, las causas pueden ser diversas desde el riego, luz y hasta deficiencias nutricionales, plagas o enfermedades. Afortunadamente, existen soluciones caseras para atender las plantas.
Entre los más populares se encuentran el agua de arroz, rica en nutrientes esenciales, y la infusión de ajo, con potentes propiedades antimicrobianas y antifúngicas. Otros trucos incluyen el uso de cáscaras de plátano para aportar potasio y fortalecer las plantas, así como el té de compost para mejorar su sistema inmunológico.
Además de estos remedios, los expertos recomiendan el vinagre blanco diluido para combatir hongos, el aceite de neem como insecticida natural, la infusión de manzanilla para eliminar plagas y enfermedades, el purín de ortiga para corregir la clorosis férrica, la ceniza de madera como fuente de potasio y calcio, las cáscaras de huevo trituradas para enriquecer el suelo, el bicarbonato de sodio contra hongos y los posos de café para aportar nitrógeno y fósforo.
Para prevenir la clorosis, es fundamental regar las plantas adecuadamente, asegurar un buen drenaje, proporcionar una iluminación equilibrada, mantener un pH del suelo óptimo, espaciar las plantas para una buena circulación de aire, controlar las plagas y podar regularmente.
