Cada vez es más común y se ha vuelto una actividad popular el preparar cerveza en casa. Para los amantes de esta bebida, la elaboración de un tipo de cerveza artesanal hecha a su gusto sirve para dar un toque y frescura diferente de aquellas de marca y comerciales, pero ¿Cómo se prepara una cerveza en casa?
Un poco de paciencia y pasión por la cocina son claves en el proceso de elaboración de cerveza en casa, sin embargo, también son necesarios estos ingredientes para su preparación: agua, malta, lúpulo y levadura, mientras que son opciones frutas o hierbas para dar un toque especial.
Dentro del equipo básico de cocina, se requiere también una olla grande de cinco litros al menos, fermentador con tapa y válvula de aire, termómetro, hidrómetro, botellas y tapones, así como cernidor o colador y una cuchara larga para mezclar.
Respecto a la preparación, los pasos son los siguientes:
1.- En la olla grande, calentar el agua hasta que alcance los 65°C. Agregar malta de cebada y revolver bien hasta que no queden grumos. La mezcla se pondrá a reposar una hora a temperatura constante.
2.- Posteriormente, se filtra la mezcla y se separan los sólidos de la malta. Luego, se lleva el líquido filtrado a la ebullición y se añade el lúpulo. Se deja hervir durante una hora y se remueve de vez en cuando para evitar se pegue en el fondo de la olla.
3.- Tras transcurrir el tiempo, se tiene que enfriar la mezcla lo más rápido posible. Acto seguido, se transfiere la mezcla enfriada al fermentador y se añade la levadura. Hay que colocar el airlock para que los gases de fermentación escapen sin aire contaminante.
4.- Finalmente, se embotella la cerveza añadiendo un poco de azúcar para provocar una segunda fermentación en la botella. Una vez que el líquido está adentro, se tiene que dejar reposar, al menos, dos semanas.