Ciudad Valles, S.L.P.- El obispo de la Diócesis de Valles, Roberto Yenny García, expresó su preocupación tras el feminicidio de una niña en el municipio de San Martín Chalchicuautla. En sus declaraciones, abordó el incremento de la violencia, particularmente contra las mujeres, y llamó a la sociedad a trabajar en conjunto para combatir este flagelo.
“Es una preocupación de toda la sociedad el aumento de la violencia y, particularmente, la violencia contra la mujer. Los feminicidios deben preocuparnos y ocuparnos a todos. No basta con animar y pedir a las autoridades que busquen justicia; también tenemos que reflexionar sobre el papel de la educación. Desde el hogar, la escuela y la iglesia debemos inculcar que la violencia no es el camino”, señaló el prelado.
Enfatizó la necesidad de reforzar los valores de reconciliación y paz desde los primeros entornos de socialización: “Aprender a dialogar y resolver los conflictos sin violencia es una tarea educativa que debemos asumir todos: en casa, en el catecismo y en la escuela”.
Además, hizo un llamado a las personas responsables de actos violentos a reflexionar sobre sus acciones y buscar la conversión: “Jesús nos pide ser gente de paz, amar a nuestro prójimo y no dañar a nadie. Invitamos a quienes provocan sufrimiento y muerte a cambiar y entender el daño que causan”.
En solidaridad con las familias afectadas por esta tragedia, Yenny García ofreció su cercanía espiritual y oraciones, expresando su esperanza de que puedan encontrar consuelo y superar el dolor que los embarga.
El caso, que ha consternado a la comunidad, recuerda la urgencia de medidas concretas para prevenir la violencia y garantizar justicia para las víctimas.
El llamado está hecho: justicia, prevención y educación son los pilares para enfrentar esta crisis.
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