Con el corazón en la mano, Jacobo Payán Espinosa despidió a su padre, Don Jacobo Payán Latuff. A nombre de la gran familia que construyó don Jacobo con doña Yolanda Espinosa, expresó las gracias al final de la misa de cuerpo presente que encabezó el arzobispo Jorge Alberto Cavazos Arizpe, quien, a su vez, estuvo acompañado por el padre Rubén Pérez.
En medio de su gran dolor por tan irreparable pérdida, destacó las virtudes de su padre para, finalmente, retratarlo como el genio que siempre fue. «Seguramente mi papá ya está tomando café con algunos amigos, hablando de futbol y haciendo algún negocio».
Sin querer, definió puntualmente a don Jacobo Payán, que todavía el fin de semana tomó café con algunos amigos y estuvo pendiente del resultado del partido del Atlético de San Luis contra el Puebla.
Don Jacobo solía hacer bromas cuando, en su mesa del café, hablaban de la muerte. Era un hombre de paz. Lo suyo, lo suyo, era hacer negocios, hablar de política y siempre buscaba impulsar a sus amigos.
Sembró en sus hijos la semilla del trabajo honesto y bueno. Jacobo hijo heredó su don de gentes y su habilidad para los negocios. Sus hijas son también muy trabajadoras. Doña Yolanda Espinosa, su esposa, lo acompañó siempre en sus arriesgadas aventuras económicas y políticas.
Nos deja un hombre grande, generoso, innovador. Deja grandes lecciones de creatividad. Sus obras perpetuarán, lo mismo que su nombre en este San Luis de la Patria.
Este felino expresa su más sentido pésame a la familia y amigos del gran Don Jacobo Payán Latuff.
Cavilaciones:
Primera: Alguien dígale a doña Teresa de Jesús Rivera que se ponga a trabajar, que desempeñe sus funciones como concejal presidenta de Villa de Pozos y que garantice los servicios básicos para el pueblo. La promesa fue que, con la municipalización, habría una mejora sustancial a favor de los habitantes, pero, como diría mi abuelita; salimos de Guatemala y llegamos Guatepeor ¡Miau!
Segunda: Ayer, celebraron los 130 años del Teatro de la Paz con un concierto bastante bueno, pero quien salió arañado es el personal de la Secretaría de Cultura que, en la transmisión que hicieron en Facebook, pusieron que la Carmina Burana es una ópera. Ustedes podrán decir que es un error mínimo, pero eso no se le puede permitir a quienes están a cargo de la política cultural en San Luis Potosí ¡Ignorantes!
Tercera: Parece que la visita de Luisa María Alcalde no hizo entrar en razón a los morenos potosinos. Los pleitos están peor que antes. Pronto les daré más noticias del tema.