Microsoft ha introducido importantes modificaciones en su popular servicio de suscripción Game Pass, que ahora cuenta con nuevas versiones y un cambio en las condiciones que afecta principalmente a los jugadores de Xbox. Con el lanzamiento de los planes «Core» y «Standard», los usuarios se enfrentan a una espera considerable para acceder a los juegos de lanzamiento en la versión Estándar, con tiempos que podrían extenderse hasta 12 meses.
Anteriormente, Game Pass ofrecía tres modalidades: Game Pass Ultimate, Game Pass para consola y Game Pass para PC. Sin embargo, en julio, Microsoft implementó una serie de cambios que eliminaron el plan para consolas y crearon las nuevas versiones Core y Standard. Esta reestructuración ha sido vista por muchos como una degradación del servicio, especialmente para los usuarios de Xbox sin acceso a una PC, ya que el plan Estándar ha perdido beneficios clave como el acceso a la nube, EA Play y, crucialmente, los juegos disponibles desde el primer día.
Aunque Microsoft ha asegurado que los nuevos juegos eventualmente llegarán al plan Estándar, la compañía también ha indicado que estos títulos podrían tardar hasta un año o más en estar disponibles. Esto depende del juego, y mientras algunos títulos podrían llegar más rápido, otros podrían requerir una espera prolongada. Esta situación genera preocupación entre los jugadores, especialmente con la llegada inminente de títulos muy esperados como ‘Call of Duty: Black Ops 6’, ‘Indiana Jones y el Gran Círculo’ y ‘Avowed’, que obligará a los usuarios a elegir entre pagar el precio completo del juego o suscribirse al plan Game Pass Ultimate para jugarlos en su lanzamiento.
Este movimiento por parte de Microsoft ha sido criticado por algunos sectores, que consideran que los cambios desmejoran la experiencia para los usuarios de consolas, obligándolos a pagar más para disfrutar de los beneficios que antes estaban incluidos en su suscripción.
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