Vecinos de Rioverde encontraron un basurero clandestino de medicamentos, algunos caducados y otros vigentes, en un terreno baldío. Denuncian la contaminación que estos pueden generar y señalan la falta de protocolos y administración de los Servicios de Salud en el municipio, pues muchas personas afirman que no hay abasto de medicinas.
Entre la maleza que se encuentra detrás del Instituto de Capacitación para el Trabajo (ICAT) de Rioverde, vecinos descubrieron decenas de cajas de cartón; en su interior, cientos de cajas más pequeñas con medicamentos caducados. Este descubrimiento fue motivo para que los ciudadanos alzaran la voz en contra de la Jurisdicción Sanitaria que opera en la región, pues es esta la encargada de administrar todo el material médico, así como su eliminación.
Este basurero evidencia la falta de protocolos para el manejo de los recursos, así como el desecho ecológico de los mismos. Por el otro lado, los vecinos denuncian la escasez de medicamentos en la región y, este hallazgo, indignó a los usuarios, que vieron cómo cientos de medicamentos fueron desperdiciados por la actual administración de los Servicios de Salud.
Entre medicamentos caducados y algunos otros todavía vigentes, se descubrió que el químico más común lleva el nombre de Novina Pravastatina, usado para tratar el colesterol en sangre y prevenir infartos e ictus. Así como otros medicamentos para diversas condiciones y malestares.
Los vecinos exigen a las autoridades estatales su intervención en este desperdicio masivo de medicamentos en Rioverde, que además de empeorar la calidad de la atención médica en el municipio y representar una pérdida económica para el Estado, también contamina el medio ambiente, pues las cajas y bolsas con los materiales médicos se encuentran a cielo abierto.
Por su parte, los trabajadores de la Jurisdicción Sanitaria señalan al encargado de la misma, Alejandro González Lezama, como el responsable de la creación de este basurero clandestino de medicamentos, pues afirman que es él quien da la orden de que todo medicamento caducado o a punto de caducar sea tirado o quemado días antes de las supervisiones estatales.
Afirman que, en caso de negarse a hacerlo, González Lezama amenaza con levantar actas administrativas, ya sea por faltas inventadas o sacadas de los expedientes de los trabajadores, a través del departamento jurídico, a quien manda a investigar las acciones de los trabajadores cometidas años atrás. Además, hace que los otros trabajadores firmen como testigos de las mismas, bajo la amenaza de que les puede hacer lo mismo a ellos también.
Finalmente, suplican ayuda de las autoridades, pues afirman que ya no pueden seguir con estas condiciones laborales y el ambiente de terror que viven a diario, pues, para amedrentarlos más, Alejandro González asegura que es muy allegado al gobernador, Ricardo Gallardo Cardona, y se jacta en que es intocable por la justicia administrativa.
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