Ciudad Valles, S.L.P.- La sequía acabo con la producción cañera, los efectos prolongados ocasionaron que la siembra de este año fuera muy pequeña, algunas plantas alcanzaron como máximo metro y medio, otros solo se quedaron en menos de un metro y servirán para replantar.
A pesar de las lluvias las plantas que se sembraron en abril no pudieron florecer lo necesario, se sembró en sequía desde octubre y no llovió más, explico la productora María Dolores Hernández.
«A lo mucho que tiene ahora es medio metro a metro y medio, esta muy chica y no tiene cañotitos para sembrar, a como debería estar para estos tiempos, pues a ver como le haces para salir adelante, nos llegó solo fertilizante, tarde pero al menos se aplicó en lluvia y eso es bueno…», expresó resignada.
En Gustavo Garmendia, ejido al norte de Valles, hay de 30 a 40 productores, que tienen desde grandes hectáreas hasta parcelas pequeñas, y que han tenido que migrar de la producción de caña a la siembra de maíz, calabaza y frijol, esperando que estos plantíos si den una buena cosecha.
Aceptó que este año perdieron muchas ganancias, son perdidas para el productor como para las familias que viven de la zafra, sobre todo familias de jornaleros, aún con el panorama adverso confían en que se pueda tener un buen precio y karbe y eso compense a los productores.
Seguiremos informando.
