Vecinos del municipio de Venado acusan al alcalde, Guillermo Martínez Guerra, de destruir el Jardín Hidalgo, patrimonio histórico de la zona. Según afirman, para construir un estacionamiento que tendría un beneficio mínimo para la ciudadanía.
El pasado jueves primero de agosto, integrantes de la Asociación Despertar Venado se apersonaron para tratar de detener una obra que el Ayuntamiento inició en el mencionado jardín. Al notar a los trabajadores, que con pico y mazo retiraban el piso de la plaza, así como barandales y demás estructuras, descubrieron que se trataba de una obra pública, por lo que manifestaron su inconformidad a lo que ellos afirmaron era una traición.
Los vecinos detallaron que existe un convenio con el alcalde, que incluso fue discutido en una sesión del Cabildo, donde se estableció que el Jardín Hidalgo, por su valor histórico, además de ser el último jardín de este tipo que queda en la cabecera municipal, no sería intervenido por ninguna autoridad, con el fin de preservarlo y mantenerlo en buenas condiciones.
Sin embargo, a poco más de un mes de concluir la administración de Martínez Guerra, el Ayuntamiento comenzó la demolición del inmueble, incumpliendo el convenio con la asociación vecinal y ocultando la información, pues los habitantes se enteraron del proyecto hasta que los trabajadores comenzaron con las obras.
Piden a las autoridades estatales que intervengan para frenar la construcción del estacionamiento, pues aseguran que, además de atentar contra el patrimonio histórico de Venado, sólo beneficiaría a los locatarios ubicados frente al jardín y perjudicaría a cientos de personas que, por su cercanía a uno de los puentes más importantes de la zona, tienen que transitar por este lugar, por lo que un estacionamiento entorpecería el flujo vehicular.
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