El obispo emérito de la Diócesis de Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, volvió a escena durante un evento en Chilapa, Guerrero, donde fue recibido con aplausos.
Según medios locales, el obispo emérito presenció las ordenaciones sacerdotales y diaconales en la Catedral de la Asunción de María, presidida por monseñor José de Jesús González Hernández, actual obispo de la diócesis Chilpancingo-Chilapa.
«Grazias aquí a monseñor Salvador Rangel Mendoza, que está con nosotros después del susto que nos dieron. De que estaba perdido, que salió con vida y ahora está entre nosotros gracias a sus oraciones. Bienvenido», expresó González Hernández, ante una ovación de los presentes.
Durante gran parte de la ceremonia, monseñor Rangel Mendoza permaneció sentado, ubicado detrás del altar.
Esta aparición del obispo emérito ocurre casi un mes después de ser víctima de un secuestro exprés en Morelos.
El 8 de mayo, monseñor Salvador Rangel declaró que perdonaba a todas las personas involucradas en el intento de dañarlo en los últimos días tras su desaparición.
En un mensaje en las redes sociales de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), Rangel Mendoza detalló que no presentaría ninguna denuncia por la situación.
«Con todo corazón perdono a todas las personas que me han hecho daño por los hechos de los que he sido víctima, así como a aquellos que me han revictimizado y producto de la desinformación», expresó.
«Por lo tanto, en ejercicio de mis derechos constitucionales, no presentaré ninguna denuncia contra las personas que tanto mal me han hecho», concluyó el obispo emérito.
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