El calor sofocante en Tabasco ha cobrado un precio devastador para la población de monos aulladores en la región. En Comalcalco, se estima que al menos 100 ejemplares han perdido la vida debido a las altas temperaturas, según informó la bióloga Silvia Santos.
El 19 de mayo pasado, un sombrío descubrimiento reveló la magnitud de la tragedia. Decenas de primates fueron hallados sin vida, algunos ya en avanzado estado de descomposición. Santos, quien encabezó la investigación, compartió que durante un reconocimiento en la zona arqueológica, lograron ubicar entre 50 a 70 cadáveres. Sin embargo, considerando la extensión del área habitada por los monos aulladores, estiman que el número de víctimas podría ascender a cientos.
Las muertes se atribuyen directamente al calor extremo. Los monos aulladores, desorientados por la falta de agua, sufren mareos que los llevan a caer de los árboles, ocasionándoles graves lesiones y, en muchos casos, la muerte.
«Ellos fallecen porque se marean, y al caer, lo que los mata es el golpe. Los traumatismos y el daño neurológico que les ocasiona la caída», explicó Santos.
Ante esta alarmante situación, la bióloga hizo un llamado a la comunidad para que no tema acercarse a los monos aulladores y, en cambio, los ayuden. La colaboración y el cuidado de estos animales en peligro son esenciales para mitigar los impactos del calor extremo y preservar la biodiversidad de la región.
Las autoridades locales han sido alertadas sobre esta problemática, y se espera que se tomen medidas para proteger a la población de monos aulladores y evitar más pérdidas trágicas debido al calor abrasador que azota la región.
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