En su Evaluación Nacional de las Drogas 2024, la Administración de Control de Drogas (DEA) de Estados Unidos ha denunciado la corrupción de las autoridades mexicanas por parte del Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), permitiéndoles operar con impunidad.
Ambos cárteles son acusados de ser responsables de la crisis de drogas sintéticas en Estados Unidos, especialmente de fentanilo y metanfetamina, mediante la operación de laboratorios clandestinos en México y una vasta red de distribución hacia EE.UU.
La DEA señala que estas redes de distribución incluyen la venta de drogas a través de redes sociales y el uso de sistemas bancarios ilegales con sede en China para el lavado de dinero.
En el caso del Cártel de Sinaloa, la DEA destaca que «puede operar libremente en algunas partes de México» gracias a conexiones corruptas con autoridades policiales, militares y políticas. Se menciona el caso de Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública condenado por tráfico internacional de drogas y conspiración, quien utilizó su posición para favorecer al cártel a cambio de millones de dólares.
Respecto al CJNG, la DEA indica que sus sobornos han alcanzado a funcionarios de todos los niveles, incluyendo al Ejército, permitiéndoles fabricar y traficar drogas con impunidad. Se destaca su participación en ataques contra la Sedena, policías y figuras políticas, como el derribo de un helicóptero del Ejército y el atentado contra el secretario de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, Omar García Harfuch, entre otros. Además, se le vincula con el soborno a jueces.
La corrupción y la impunidad asociadas con estos cárteles representan un desafío significativo para la seguridad tanto de México como de Estados Unidos, según la evaluación de la DEA.
Seguiremos informando.
