Ciudad Valles, S.L.P.- Marisol es una joven madrea que está viviendo el calvario de haber sido víctima de violencia física y psicológica por parte de su expareja, le ha arrebatado a su hijo, un pequeñito de tres meses, que aún esta lactando. Hoy en llanto, en medio de una crisis de ansiedad, suplica a las autoridades que le ayuden a recuperar a su bebé.
Todo comenzó hace unos meses cuando Edson Rolando comenzó a comportarse de manera violenta con Marisol y su primer hijo de cuatro años, eran común los gritos, las maldiciones, los adjetivos despectivos y mucha violencia psicológica contra ambos, ella ya estaba embarazada y se dedicaba 100% al hogar, dejo de trabajar para dedicarse de lleno a su hogar a su pareja e hijo, su embarazo no fue suficiente para que Edson Rolando parará sus agresiones.
Una vez que nació su segundo hijo, las cosas fueron peor en casa, ese lugar donde ella soñó tener amor y tranquilidad, se volvió un infierno; su agresor no tuvo piedad con ella la sometió a crueles tratos.
Marisol recuerda que ella padeció depresión Post-parto, no pudo recibir ayuda de nadie, pues él la mantenía alejada de los suyos, su mente esta totalmente bloqueada no recuerda cuál fue el punto de quiebre, no sabe como comprendió que él no iba a cambiar.
Valientemente decidió salirse de ese infierno… las cosas estaban por empeorar.
Desde hace tres meses Marisol vivió las represalias de haber tomado valor para decir «No más» , fue presa de insultos y agresiones psicológicas, por llamadas y mensajes de redes sociales, llegando al grado de verse obligada a entablar una denuncia por violencia familiar.
Apenas el pasado 15 de abril decidió otorgarle el perdón a su pareja, esto por presión de las autoridades de la Cuarta Delegación de la Fiscalía al citarla para conciliar los problemas con su agresor, que con una impresionante violencia psicológica la hizo doblegarse ante las autoridades, ella solo dijo que ella no es una persona de problemas, ella «solo quería llevarse bien con él por su hijo».
«A mi otro hijo no lo quería, ahí empezaron los problemas, no lo quería le decía cosas muy muy feas, mi niño tiene cuatro años, y yo defendía a mi hijo, por supuesto… Ahora yo tengo una demanda por violencia familiar, su mamá -su suegra- no me quiere devolver a mi hijo, yo he sido violentada pero yo solo quiero que me devuelvan a mi hijo, el anda como si nada y yo quiero que las autoridades hagan algo ya… Yo lo lleve al negocio de la abuelita, para tener buena convivencia con él y su familia, porque yo no soy de problemas, y ahora no puedo ver a mi hijo…».
Marisol desde el pasado jueves 11 de abril no ha visto a su pequeño, pero sufre a diario por no tenerlo en sus brazos, su bebé necesita leche materna, no puede alimentarlo y su dolor físico crece.
Le fue notificada además una orden de restricción por parte del padre que la acusa ahora de violencia familiar, ella se aboco de inmediato a exigir pruebas, ya se le practicaron al niño exámenes y cuenta con el certificado médico que descartan golpes de cualquier tipo.
«He sido violentada, he llevado certificados médicos -Ministerio Público- y nadie me hace caso, nadie me ayuda, me hinque ante él para que me deje ver a mi hijo y no… Me da mucho miedo que me lo quiten, que se lo llevé y no lo vuelva a ver nunca. Él es muy violento… Ya no sé que puerta tocar, ya es mucho…»
Marisol esta tomando terapias psicológicas por las crisis de ansiedad; ya pidió ayuda el DIF pero la familia paterna no dejo que vieran al niño, el personal fue atendido por una ventana de la casa donde lo tienen, literalmente, encerrado.
No han asistido a los llamados de la Procuraduría de la Defensa del Niño, Niña y Adolescentes, solo fue a una reunión con los abogados y en esa sesión Edson Rolando discutió a gritos con un litigante del organismo DIF.
«Me la he pasado día y noche en el MP, me voy muy tarde, no he comido nada, mi familia me apoya, le he suplicado que me deje ver a mi niño y solo recibo fotos de él. Apóyenme a rescatar a mi hijo, por favor ayúdenme vean mi desesperación y que no digan solamente es la señora que se la pasa llorando por su hijo, ya no se que hacer… yo no quería problemas pero… yo solo quiero ver a mi bebé …», Marisol ya no pudo seguir hablando sus manos comenzaron a temblar y su llanto se volvió más fuerte nuevamente esta teniendo una crisis, solo repetía ayúdenme a que me devuelvan a mi hijo.
Seguiremos informando.