Un devastador ataque terrorista sacudió un concierto de rock en las afueras de Moscú este viernes, dejando un saldo de al menos 133 personas fallecidas y más de 140 heridas. Un grupo de hombres armados, vistiendo ropa de camuflaje, irrumpió en el Crocus City Hall, donde miles de personas se habían congregado para disfrutar del espectáculo musical.
El cielo de Moscú se tiñó de naranja y una densa columna de humo se elevó sobre la ciudad después de que los atacantes prendieran fuego al techo del reconocido auditorio, que había acogido a numerosos artistas de renombre en el pasado.
El ataque fue reivindicado por un grupo afiliado al autodenominado Estado Islámico (EI), aunque esta afirmación aún no ha sido verificada de manera independiente.
Los informes indican que los atacantes dispararon indiscriminadamente contra la multitud reunida en el recinto, mientras que otros arrojaban cócteles Molotov, desatando el pánico entre los asistentes. Testigos relataron escenas de caos y horror, con personas corriendo en busca de refugio y algunos quedando atrapados en el interior del edificio en llamas.
Las autoridades rusas han desplegado un amplio operativo en toda la ciudad en busca de los responsables del ataque, que se cree que habrían escapado en un vehículo blanco. Hasta el momento, once personas han sido detenidas en relación con el incidente, según informó el jefe de las fuerzas de seguridad al presidente ruso, Vladimir Putin.
El EI anunció su presunta responsabilidad a través de su canal oficial en la red social Telegram, aunque algunos analistas advierten que el grupo tiene antecedentes de atribuirse ataques con los que no tienen ninguna relación.
El asalto ha generado una ola de condena y solidaridad a nivel internacional. Francia, Alemania y Estados Unidos expresaron su consternación por el atentado y ofrecieron su apoyo a las víctimas y sus familias. Sin embargo, también ha habido especulaciones sobre posibles motivaciones geopolíticas detrás del ataque, con algunas voces sugiriendo que Rusia podría culpar a Ucrania como parte de su conflicto en curso.
En medio de la tragedia, la comunidad internacional se une en solidaridad con el pueblo ruso y espera que los responsables de este horrendo acto sean llevados ante la justicia.
Seguiremos informando.
