La Ciudad de México se enfrenta a una crisis de agua que preocupa a sus habitantes. La escasez se ha agravado en los últimos meses debido a una prolongada sequía y temperaturas inusualmente altas, que han llevado a que las presas que abastecen de agua estén en niveles mínimos. Esta situación ha provocado cortes temporales de suministro en diversas áreas de la capital y su zona metropolitana.
Expertos meteorológicos señalan que el fenómeno de ‘El Niño’, que comenzó en junio de 2023, ha impedido la llegada de las lluvias esperadas desde enero, dejando al país con un déficit de precipitación del 41.4%. El sistema de presas Lerma-Cutzamala, crucial para el suministro de agua a la Ciudad de México, está apenas al 37% de su capacidad, cuando históricamente se encontraba al 70% en esta época del año.
El problema se agrava debido a la infraestructura insuficiente y deficiente para abastecer a una población en constante crecimiento. La falta de mantenimiento y las fugas en las redes de distribución han provocado la pérdida del 40% del agua. Además, la sobreexplotación de los mantos acuíferos ha generado un déficit hídrico que se prevé que afecte al 70% de la población para el año 2030.
Ante este panorama, la llegada de la temporada de lluvias, que suele iniciar entre junio y octubre, no garantiza una solución inmediata. Los modelos meteorológicos indican una temporada más cálida de lo normal, lo que incrementará la evaporación y reducirá las precipitaciones, agravando aún más la sequía.
Los expertos abogan por medidas urgentes, como mejorar la infraestructura de distribución y tratamiento de agua, así como la concienciación ciudadana sobre el uso responsable del recurso. Se destacan iniciativas para separar el drenaje pluvial del de aguas residuales, recargar los mantos acuíferos con agua de lluvia y reutilizar el agua para mitigar la crisis hídrica.
La situación en la Ciudad de México es alarmante y requiere acciones inmediatas y a largo plazo para garantizar el acceso equitativo y sostenible al agua para toda su población.
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