A pesar de ser un concepto cada vez más familiar, muchos aún no comprenden por completo qué es la huella de carbono y cómo impacta en el cambio climático. Simplificando, se trata del rastro ambiental que dejamos, es decir, las emisiones de gases de efecto invernadero generadas por nuestras actividades diarias.
Desde comprar alimentos hasta ducharnos, todo tiene un costo medioambiental. El mundo se dirige hacia un modelo sostenible basado en la economía circular, que protege el planeta y promueve la generación de recursos.
El ecoturismo, enfocado en conocer espacios naturales de manera responsable, se vuelve cada vez más popular entre los viajeros. Descubrir la vida y las tradiciones locales mientras se protege el entorno es una tendencia al alza.
En España, el turismo rural y sostenible ofrece una amplia gama de opciones para disfrutar de la naturaleza y la cultura. Sin embargo, mantener estos espacios intactos es un reto ante la amenaza del turismo masivo.
Para reducir nuestra huella de carbono, el mercado voluntario de carbono ofrece la posibilidad de compensar nuestras emisiones apoyando proyectos de reforestación y eficiencia energética.
Con herramientas como CeroCO2 o Carbon Footprint, podemos calcular, reducir y compensar nuestra huella. La elección del medio de transporte es crucial: el avión es el más contaminante, mientras que el tren es el más sostenible.
El ecoturismo no solo enriquece el entorno, sino que también sensibiliza a la sociedad sobre la importancia de elegir acciones más sostenibles en todos los ámbitos de la vida cotidiana. La demanda de servicios sostenibles está en aumento, lo que impulsa a las empresas a adoptar prácticas más respetuosas con el medio ambiente.
Seguiremos informando.
