Monseñor Ramón Castro Castro, secretario General de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) y obispo de la Diócesis de Cuernavaca, ha emitido un llamado urgente a los candidatos a la Presidencia de la República para que presten atención y encuentren soluciones a la grave situación de violencia que azota al país.
En una entrevista con Joaquín López-Dóriga informó que la Iglesia católica mexicana se reunirá con los tres candidatos presidenciales -Claudia Sheinbaum, Xóchitl Gálvez y Jorge Álvarez Máynez- el próximo 11 de marzo, como parte del Diálogo Nacional por la Paz.
«Esto es inconcebible (la violencia en el país), sin embargo, nos está llevando hacia allá la situación que vivimos, aunque tenemos esperanza en esta agenda nacional por la paz que hemos creado, que ha entrado en una segunda etapa, pero que requiere tiempo», expresó.
«Nos encontraremos, con el favor de Dios, el 11 de marzo con los tres candidatos a la Presidencia, los estamos invitando. Aún no hemos recibido confirmación de uno de ellos», añadió.
El obispo enfatizó la importancia de que los candidatos comprendan la gravedad de la situación y se comprometan a buscar soluciones una vez que asuman la presidencia. También destacó que la fuerza del Estado está en manos del próximo gobernante, por lo que es crucial que actúen con determinación.
Las declaraciones de monseñor Castro y Castro coinciden con la revelación de que sacerdotes en Chilpancingo, Guerrero, han logrado una tregua entre grupos criminales en un esfuerzo por detener los ataques armados que han afectado a la ciudad en las últimas semanas.
Ante esta situación, Castro y Castro instó a reflexionar sobre la estrategia actual de «abrazos no balazos», que según él, no ha dado resultados. Subrayó la necesidad de que el Estado utilice su fuerza para abordar la violencia de manera efectiva y ofrecer soluciones concretas a los ciudadanos afectados.
Las palabras del obispo reflejan la preocupación de la Iglesia católica mexicana por la escalada de violencia en el país y su llamado a las autoridades y líderes políticos a tomar medidas urgentes para garantizar la seguridad y el bienestar de la población.