La misión lunar liderada por Astrobotic Technology, que había lanzado el primer módulo de aterrizaje lunar desde Estados Unidos en cinco décadas, enfrenta complicaciones después de que su nave espacial, Peregrine, experimentara una pérdida «crítica» de propulsor. El incidente ocurrió horas después del lanzamiento desde Florida hacia la Luna.
La nave espacial, que lleva a bordo cinco instrumentos científicos de la NASA y otras 15 cargas útiles de diversas organizaciones y países, sufrió un problema en su sistema de propulsión que impidió que se orientara adecuadamente hacia el Sol. Esto afectó la capacidad de la nave para cargar sus baterías.
Astrobotic intentó una maniobra improvisada para reorientar los paneles solares hacia el Sol, logrando cargar la batería con éxito. Sin embargo, persiste un problema subyacente en el sistema de propulsión, amenazando la capacidad del módulo Peregrine para aterrizar suavemente en la Luna.
La empresa está evaluando alternativas de misión, lo que podría implicar que no intentarán realizar el aterrizaje lunar planeado para el 23 de febrero. Esta misión, desarrollada bajo un contrato de $108 millones con la NASA, representa un esfuerzo significativo para reducir los costos de módulos de aterrizaje robóticos lunares, involucrando al sector privado en los objetivos de exploración lunar. La NASA y otras instituciones que participan en esta misión están a la espera de más actualizaciones por parte de Astrobotic.
Astrobotic Technology enfrenta una situación crítica con la pérdida de propulsor en su misión lunar. A pesar de un intento exitoso de recargar las baterías tras una maniobra improvisada, persiste un problema en el sistema de propulsión. La evaluación de alternativas para la misión continúa, dejando en duda el aterrizaje lunar programado.
Seguiremos informando.