En apoyo a la salud de los potosinos, la Comisión Estatal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (COEPRIS) realiza de manera permanente, acciones de vigilancia y control sanitario a los rastros tanto públicos como privados para garantizar que los productos cárnicos que se consumen en el estado sean de calidad.
Las acciones de revisión sanitaria y muestreo a los rastros se realizan de manera permanente y se intensifican en las temporadas de mayor demanda de productos cárnicos como Xantolo en la Huasteca Potosina, Navidad y Año Nuevo. Actualmente, se tienen registrados en todo el estado un total de 45 centros de matanza, de los cuales, 29 son municipales y 16 particulares.
De enero a la fecha, la COEPRIS ha realizado un total de 49 visitas de control sanitario a rastros, 83 muestreos, así como capacitación a trabajadores de los centros de matanza en el adecuado manejo de productos cárnicos. Durante las visitas a los rastros se supervisa que den cumplimiento a la NOM-194-SSA1-2004 “Especificaciones Sanitarias en los establecimientos dedicados al Sacrificio y Faenado” la cual contempla especificaciones como: instalaciones adecuadas, sacrificio aéreo, sistema de insensibilización, que el rastro cuente con un médico veterinario, agua potable y descarga de desechos, sellado de las canales, documentación que ampare el origen lícito del ganado, además de que el personal que labora en los mismos, lleve a cabo prácticas de higiene acorde al manejo de productos cárnicos.
El Programa de Vigilancia y Control Sanitario de Productos Cárnicos incluye acciones de vigilancia sanitaria en rastros y carnicerías, acciones de capacitación a trabajadores de los centros de matanza, así como el muestreo del producto cárnico para la determinación de clembuterol, además en los establecimientos que se dedican a la venta de productos cárnicos como carnicerías, pollerías y tiendas departamentales se supervisa que los productos tengan un manejo y almacenamiento adecuado y sin riesgos sanitarios.
En el año se han realizado reuniones con presidentes municipales y responsables de los centros de matanza, a quienes se les informa de los resultados de las visitas de control sanitario y muestreos, además de proporcionarles asesorías de mejoras en su infraestructura.