Si bien es cierto que al pasar los años nuestra capacidad cognitiva puede verse mermada por los malos hábitos y el deterioro propio de la edad, pero ¿es posible mejorar la función cognitiva, a pesar de los años? La respuesta es simple y sencilla: sí, la buena noticia es que darle un impulso extra a nuestro rendimiento cognitivo no requiere de nada especial, sino que basta con mantener algunos hábitos diarios para conseguirlo.
Aprende cosas nuevas
Aprender nuevas cosas y habilidades exigentes compromete y activa el cerebro para mantenerlo fuerte a medida que envejece. Se ha encontrado que los puzzles como rompecabezas, juegos de palabras, sudokus y otras actividades similares pueden lograr una mejora significativa en las capacidades cognitivas en la vejez.
Asimismo, jugar videojuegos, ya sea de acción o de entrenamiento cognitivo, mejoraría la velocidad de respuesta, precisión mano-ojo y otras habilidades de la motricidad fina en adultos mayores.
Disfruta de la luz del sol
Una buena forma de mejorar la función cognitiva es disfrutar del sol. Aunque el exceso de luz solar puede ser perjudicial para su piel, su carencia también puede ser mala.
La evidencia ha sugerido que personas de mediana y avanzada edad obtenían mejores resultados cognitivos y menos tendencia a la demencia si tenían niveles más altos de vitamina D en su sistema, algo que se obtiene de forma natural del sol.
Baila, escucha música, haz ejercicio
Algunos estudios han demostrado que las actividades de ocio, como el baile, escuchar musica, pueden reducir el riesgo de demencia, además, el baile y la música no se detienen allí, pues mantienen a tu cuerpo y a tu cerebro ocupados.
Las actividades que mejoran la función cognitiva son las que obligan a tomar decisiones rápidas, así como actividades que implican el aprendizaje de nuevos patrones.
Duerme lo suficiente
Otra forma de mejorar la función cognitiva es durmiendo las horas que necesitemos. Hace mucho que se sabe que el cerebro requiere de sueño para consolidar el aprendizaje y la memoria.
Los investigadores han encontrado una asociación entre la mala calidad del sueño y la disminución del volumen de materia gris del cerebro, la cual ayuda a controlar los procesos importantes de la memoria de trabajo y la función ejecutiva.
Habla con tus amigos
Tener una red de apoyo es importante para mejorar la función cognitiva. Una revisión muestra que podría existir una relación positiva entre el apoyo social y la cognición, es decir, mayores niveles de apoyo social afectan positivamente el funcionamiento cognitivo de las personas.
Divertirse con un buen amigo ayuda a disminuir el estrés de las actividades cotidianas, es más, tener una conversación de calidad con él puede aumentar el bienestar y reducir los niveles de estrés al final del día.
Recuerda que la función cognitiva la podemos potenciar con pequeñas acciones saludables, que ayuden a mantenernos sanos y activos a nivel físico y mental.
Estefanía López Paulín
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