En mi grupo de amigos gatunos, estamos felices porque murió el viejo sabueso, aunque no tenía cabeza desde hace casi dos años, era un animal muy bien entrenado y con facultades especializadas a pesar de que no sabía usarlas. De vez en cuanto, tenía rabietas y lanzaba mordidas a diestra y siniestra, pero eso ya es cosa del pasado. Murió ese viejo perro, pero llegó uno nuevo, es un bebé y todavía nadie sabe cómo se va a comportar.
Este jueves, el Congreso del Estado dio a conocer que, con la aprobación de 34 cabildos, se consumaba la desaparición de la Auditoría Superior del Estado y se daba el nacimiento del Instituto de Fiscalización Superior del Estado; dicen que tendrá autonomía técnica y de gestión para poder desempeñar sus atribuciones, que podrá decidir sobre su organización interna y sobre su funcionamiento y, desde luego, se apegará a la ley para proceder.
Llegó el nuevo sabueso y la esperanza que tienen los ciudadanos es que no se la viva dormido como lo hacía su antecesor, que no se convierta en una herramienta política para defender los intereses o cobrar las revanchas del patrón, sino que, de verdad, sea un medio para garantizar que los recursos públicos de los potosinos se están utilizando adecuadamente.
Ojalá que el nuevo sabueso tenga el olfato bien desarrollado y que sea un buen perro de caza porque hay muchas anomalías en los ayuntamientos y muchos exalcaldes, exfuncionarios y hasta exdiputados que andan como si nada luego de haberse llenado las bolsitas con dinero público.
Cavilaciones:
Primera: La noticia de que Xóchitl Gálvez será la candidata única del Frente Amplio por México ha provocado entre sus simpatizantes potosinos una euforia desmedida. Hasta parece que ya ganó la presidencia; se les olvida que apenas viene lo bueno y que tendrán que trabajar arduamente para conseguir el objetivo que se han propuesto. No se aceleren, amiguitos, acuérdense que del plato a la boca se cae la sopa.
Segunda: Y en el IMSS un cochinero; mientras que Zoé Robledo levanta la mano queriendo convertirse en el candidato de Morena a la gubernatura de Chiapas y lo sientan porque tiene más impulso la prima del presidente López Obrador, en las tierras del Potosí, las clínicas y hospitales están patas arriba y en total descuido. No hay medicamentos ni personal y ni qué decir de los elevadores que, por falta de mantenimiento, son trampas mortales. No han aprendido.
Tercera: De cara a las elecciones de 2024, han surgido muchas encuestadoras que se venden como si tuvieran más poder que la misma Mhoni Vidente para ver el futuro, pero a estas encuestas se les van las cabras muy feo y meten a cada perfil. Muchos muy quemados, otros que ni en su casa los conocen ¿Cuánto estarán pagando para aparecer en estos tremendos fraudes?
