Es tan común que hasta da pena; cuando hay una desgracia, las autoridades buscan lavarse las manos cual Pilatos y echarle la culpa a alguien más, sin embargo, la evidencia suele mostrar con claridad que no son cuestiones particulares, sino que, en lo general, la culpa es de varios.
Lo ocurrido durante la madrugada del pasado lunes en el Barrio de Tlaxcala debe ser un fuerte llamado de atención para todas las autoridades porque, aunque ahora lo nieguen, es claro que muchos sabían lo que estaba pasando, pero nadie se preocupó por prevenir ¿Dónde estaba Gobernación, Comercio, Seguridad Pública, Protección Civil? Y que se asiente que la gente, los asistentes al baile (en su mayoría familias) son los menos responsables del hecho.
Que si fue Balderas, que si Chalita, que si Chana o Juana, las autoridades tienen en este tema otro reto porque el delito ya se cometió y ahora deben impedir que la muerte de dos personas y las lesiones de una veintena no queden impunes.
Ojo, porque así hay muchos antros que operan con muchas irregularidades ¿Cuántos muertos tuvieron que registrarse para que se clausurara el Greko? Lo peor del caso es que estos espacios, supuestamente, cumplen con todas las de la ley. Como ese, muchos más.
Ya fue mucho de hacerse como que la virgen les habla, todas las autoridades tienen que aplicarse y trabajar de manera coordinada para dar los resultados que la gente está esperando. Se supone que para eso es la dichosa mesa para la construcción de la paz. Nos están quedando mal.
Cavilaciones:
Primera: En Rioverde, traen un escandalazo porque el regidor del Partido Verde, Pablo Arturo García Noyola, hizo público el precio de su voto si es que el alcalde, Arnulfo Urbiola, lo requiere para solicitar licencia a fin de ir por la reelección en los comicios del próximo año. El angelito quiere 400 mil del águila. Salió muy trompudo el Pablito.
Segunda: Por los rumbos de la Huasteca, la cosa está que arde y no precisamente por la calorsss. Trascendió que, tras la ola de violencia, los hermanos Gutiérrez, dueños de Grupo Gusi, solicitaron la presencia de la Marina porque dicen que ni el Ejército ni la Guardia Civil sirven para dos cosas. El señalamiento no es cosa nueva, lo que sí sorprende es que los empresarios recurran a estas llamadas de auxilio.