La Dra. Diana Elena Leguízamo Jiménez, Coordinadora de Hospitales Básicos Comunitarios de los Servicios de Salud de San Luis Potosí platicó que esta conmemoración tiene mucha historia, debido a que en México durante los primeros años de la década de los 50´s hubo una fuerte epidemia de poliomielitis, por lo cual surgió la necesidad de rehabilitar a quienes quedaron con secuelas, para llevar a cabo tales terapias de manera profesional fue necesario instituir en 1955 la primera Escuela para Técnicos en Terapia Física.
Ese mismo año, el día 5 de julio se estableció como el Día del Fisioterapeuta debido a que en esta fecha, se fundó la Asociación Mexicana de Terapia Física y Rehabilitación (AMTFR), que posteriormente, cambiaría su nombre a Sociedad Mexicana de Medicina Física y Rehabilitación.
Por lo que este día se reconoce a los profesionales de ésta área de la salud, que ayudan a cambiar la vida de las personas, a través de sus movimientos, lenguaje y audición. En los Servicios de Salud de San Luis Potosí durante el año en curso, se tiene registradas 7 mil 714 atenciones de rehabilitación, con un total de 138 pacientes rehabilitados.
Leguízamo Jiménez afirmó que el objetivo de la medicina física y rehabilitación es recuperar la funcionalidad de una persona para que mejore su calidad de vida y logre la inclusión social y laboral. Por lo que especificó de manera detallada su funcionalidad: el terapista físico previene alteraciones en el funcionamiento neuro-músculo-esquelético de personas sanas y también recuperan las funciones motoras de personas con discapacidad o deficiencias temporales, readaptándolas a sus actividades cotidianas.
Además, el terapista ocupacional entrena y recupera a las personas con discapacidad en sus actividades familiares, sociales y laborales para mejorar su independencia funcional. Y el terapista comunicacional o fonoaudiólogo que se encargará de la comunicación oral, escrita y corporal, deteriorada o interrumpida respectivamente.