Las historias de amor LGBT deberían ser iguales a cualquier otra historia de amor, pero todavía hoy atraviesan por el miedo de mostrar ese afecto en público o de las reacciones de familia y amigos ante esa relación, pese a la discriminación que persiste, la resistencia del amor y la existencia de la población LGBTI+ prevalece.
En las historias de amor LGBT, dar un abrazo a alguien que quieres, tomar de la mano a tu pareja o decir “te amo” no deberían ser acciones por las que sentirse amenazado o amenazada si se realizan en público, sin embargo, las personas que forman parte de la población LGBTI+ todavía enfrentan el escrutinio social y la discriminación.
Y es que, aunque en 2023 hay mayor reconocimiento de sus derechos por tratados internacionales y por las leyes mexicanas, las historias de amor LGBT todavía hoy son historias de resistencia, ser visible como parte del colectivo LGBTI+ implica coraje y resiliencia, aunque el objetivo es simplemente ser, sin la necesidad de una alerta constante para validar o proteger su existencia frente al resto.
En México, de acuerdo con datos de la Encuesta Nacional sobre Diversidad Sexual y de Género (ENDISEG 2021), realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), la población LGBTI+ de más de 15 años en el país asciende a 5.5 millones de personas. Es decir, una de cada 20 personas en México se asume como parte de esta población.
De estos 5.5 millones de personas, 4.6 millones se identifican con una orientación distinta a la heterosexual (las otras 909 mil son personas trans o no binarias), de ese total, 51.7 por ciento se autoidentificó como bisexual; 26.5 por ciento, como gay u homosexual; 10.6 por ciento, como lesbiana y 11.2 por ciento reportó tener otra orientación.
Según esta encuesta, que es la primera de su tipo en el país, y que sirve como un instrumento para conocer la situación y necesidades de esta población históricamente discriminada, el 30.6 por ciento de estas personas se encuentran casadas o en una relación de unión libre, y tanto las muestras de afecto en público, como el matrimonio o la adopción, siguen sin ser del todo aceptadas por la opinión del grueso de la población y tampoco por las y los mismos integrantes de la población LGBTI+.
Los derechos civiles de todas las personas no pueden estar a discusión, pues la Constitución desde su artículo primero establece el principio de no discriminación, sin embargo, este ejercicio respecto a la opinión pública de las y los mexicanos da prueba de lo mucho que queda por erradicar la discriminación contra la población LGBTI+.
Estefanía López Paulín
Contacto: psc.estefaniapaulin_uaslp@hotmail.com
Número: 4881154435