Año con año podemos ver como nuestro dinero va perdiendo más valor, desde ver que antes los gansitos costaban 5 pesos y ahora se encuentran en casi 20 pesos, todo esto siendo producto de la temible inflación que se como un monstruo imparable debora la cartera de millones de mexicanos en todo el país. Siendo pocos los que se salvan de esto. Un estudio realizado por sinntetic «Pulso del Consumidor» arrojó cifras bastantes exactas de lo que el mexicano vive quincena a quincena, siendo su mayor temor no llegar a fin de mes , cosa que desgraciadamente comprobó el estudio, mostrando que el 54% de los mexicanos nunca llega a fin de quincena con dinero en su bolsillo.
A pesar de que durante los últimos 4 meses el INEGI, ha reportado en sus censos que el nivel de inflación en méxico se ha mantenido a la baja de forma consecutiva, casi nada percibe que realmente sea así, siendo una inflación muy marginal que parece no alcanzar a casi nadie.
Los mexicanos siguen reportando que con el dinero ya no alcanza nada, teniendo que disminuir el consumo de alimentos y comprando de semana a semana los productos para hacer rendir el dinero lo mayor posible. Hoy realmente es una misión imposible alimentar a una familia con sueldo minimo, productos como el pollo, huevo, carne se mantienen una inestabilidad de precios, lo que dificulta que los 4 meses consecutivos de inflación muestren una baja real en estos productos.
El mexicano llega al mercado y semana a semana todo se encuentra más caro, a pesar de que la inflación del país en este momento es del 5.84%. ¿A qué se debe entonces que nuestro dinero no rinda?, la respuesta a esto nos la comparte Sergio Negrete, economista mexicano. Quien nos llama a prestarle atención a la inflación subyacente, que se mantiene en cifras muy por arriba a la inflación normal, con un porcentaje de 7.39%. Esto se refiere a que este tipo de inflación mide a mayor plazo el nivel económico y de la alza de un país, siendo más exacta que la inflación que se reporta mes con mes, que reporta una menor cantidad.
El Banco de México tuvo que subir la tasa de intereses al 11.25% para lograr combatir de forma momentánea el alza de precios, una solución que no está dando frutos a corto plazo y podría traer más problemas en un futuro.
Seguiremos informando.