En el estado de Guanajuato, México, se encuentra el Santuario de Jesús del Nazareno, conocido como la Capilla Sixtina Mexicana. Inspirado en la famosa Capilla Sixtina del Vaticano, este santuario es considerado una de las obras más importantes del estilo barroco en México y es reconocido como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
El pintor de los murales de la Capilla Sixtina Mexicana, Miguel Antonio Martínez Pocasangre, dedicó 30 años de su vida al proyecto. Por encargo del párroco Luis Felipe Neri de Alfaro, combinó el estilo europeo con influencias indígenas. Los óleos de las paredes son obra de Juan Rodríguez Juárez.
El Santuario de Atotonilco está inspirado en la doctrina de San Ignacio de Loyola y se cree que toma referencias del Santo Sepulcro en Jerusalén. La UNESCO lo ha reconocido como uno de los ejemplos más hermosos de la arquitectura y el arte barrocos de la Nueva España.
Además de su valor artístico, el Santuario de Jesús del Nazareno tiene un significado histórico importante. Se dice que aquí Miguel Hidalgo tomó el estandarte de la Virgen de Guadalupe, que se convirtió en la bandera de la lucha durante la Independencia de México. También fue el lugar de la boda de Ignacio Allende, otro destacado personaje de la Independencia, con María de la Luz Agustina y Fuentes.
Visitar la Capilla Sixtina Mexicana en Atotonilco, a tan solo 290 kilómetros de distancia de la ciudad de Guanajuato, brinda la oportunidad de apreciar una joya artística y cultural sin tener que viajar hasta el Vaticano.
