La Tierra está experimentando actualmente una sexta extinción masiva de especies, según revela un nuevo estudio publicado en la revista Biological Reviews. Este fenómeno es impulsado por la actividad humana y su impacto en la naturaleza. Después de analizar más de 70 mil especies en todo el mundo, las científicas Catherine Finn, Florencia Grattarola y el científico Daniel Pincheira-Donoso descubrieron que la pérdida generalizada de biodiversidad ha alcanzado niveles alarmantes de degradación del ecosistema en un corto período de tiempo.
El estudio, titulado «Más perdedores que ganadores: investigando la defaunación del Antropoceno a través de la diversidad de las tendencias poblacionales», señala que la disminución de la biodiversidad a nivel mundial continúa a un ritmo acelerado y, a pesar de los crecientes llamados para mitigar esta pérdida, la sexta extinción masiva ya está en marcha. De las especies estudiadas, el 48% está experimentando una disminución en sus poblaciones, mientras que el 49% se mantiene estable y solo el 3% está aumentando su número.
En comparación con otros vertebrados, los reptiles presentan la proporción más alta de especies con tendencias poblacionales estables, con un 70%, seguidos por los peces, con un 58%. Los investigadores enfatizan que estos hallazgos refuerzan la advertencia de que la biodiversidad se encuentra al borde de una crisis de extinción. Esta crisis tendrá consecuencias ecológicas y ecosistémicas significativas, ya que el funcionamiento de los ecosistemas se ve gravemente afectado por la disminución de las poblaciones y los cambios resultantes en la composición de las comunidades.
Es importante destacar que incluso las especies actualmente clasificadas como «no amenazadas» en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) están experimentando una disminución en un 33% de los casos, lo cual es preocupante. El equipo de académicos también observó patrones geográficos relacionados con la desaparición de especies, la estabilidad y el crecimiento. Las disminuciones tienden a concentrarse en regiones tropicales, mientras que la estabilidad y los aumentos tienden a expandirse hacia climas templados.
Según la investigación, todas las especies combinadas muestran una tendencia en la cual las poblaciones en aumento se concentran en regiones subtropicales a templadas, especialmente en América Central y del Norte. Los autores del estudio advierten que ya es demasiado tarde para simplemente reconocer esta extinción masiva de especies. Por lo tanto, afirman que es crucial que se convierta en una prioridad global reducir la tasa de disminución de la biodiversidad. De lo contrario, toda la humanidad corre un grave peligro.
«Nuestro estudio contribuye a señalar que la biodiversidad global está ingresando en una extinción masiva, lo que pone en riesgo la heterogeneidad y el funcionamiento de los ecosistemas, la supervivencia de la biodiversidad y el bienestar humano», advierten los investigadores.