Los efectos del cambio climático ponen en riesgo los cultivos de todo el mundo, por ello investigadores y científicos del Instituto Internacional de Investigación del Arroz, con sede en Filipinas, están desarrollando variedades de arroz resistente a inundaciones, sequías y salinidad.
Algunas de estas variedades modificadas genéticamente ya se están cultivando en arrozales inundados en Filipinas, y los científicos e investigadores aseguran que pueden resistir en agua hasta dos semanas más que el arroz normal.
Además, plantaron variedades resistentes a sequías y que pueden seguir creciendo con un mínimo de agua en India, Nepal y Filipinas, estas variedades mejoradas les darán a los agricultores mayor rendimiento, les ayudará a poder sembrar en terrenos que antes no eran óptimos y a que tengan menos pérdidas ante daños por fenómenos meteorológicos.