Al igual que en la Capital del país, Morena aprovechó que Genaro Garcia Luna, ex secretario de seguridad pública con Felipe Calderón fue declarado culpable por un tribunal de los Estados Unidos para desacreditar al Partido Acción Nacional, lo que generó un ríspido debate en la sesión ordinaria de este jueves en el Congreso del estado.
En asuntos generales, el diputado Cuahutli Badillo Moreno, buscó cargar al PAN y a sus representantes la “factura política” del juicio de García Luna y les hecho en cara la corrupción que se vivió en los sexenios calderonista y de Vicente Fox, con fotografías de ambos exmandatarios.
El hecho no lo dejaron pasar los panistas y tanto Rubén Guajardo como Juan Francisco Aguilar, le recordaron a Cuahutli que sí Felipe Calderón es culpable de algo, “también lo es el actual fiscal Alejandro Gertz Manero que colaboró con Fox”.
Además, Juan Francisco Aguilar les hecho en cara que en el actual gobierno ya van 170 mil muertos, “son más que en los últimos tres gobiernos de Fox, Calderón y Peña Nieto”, les dijo.
José Luis Fernández Martínez, “el Chiquis” entró al quite de Cuahutli, y a su vez le recordó a los blanquiazules, la cauda de corrupción y de hechos sangrientos que se vivieron en el sexenio de los “hechos aislados” y de la “legión extranjera” de Marcelo de los Santos.
Rubén Guajardo y Juan Francisco Aguilar no se amedrentaron y volvieron a la carga, el primero buscó acalambrarlos abriendo la posibilidad de que Marcelo de los Santos esté en las boletas del 2024, lo que avivó él encontronazo.
A su vez, Juan Francisco Aguilar fue más puntilloso y recordó al Chiquis y a sus aliados que las cuatro regiones del estado están en espera de Justicia, “Cárdenas espera justicia; en
Cerritos no pueden andar en las calles; en Cd Valles viven con miedo y balaceras, mejor ocúpense de eso en lugar de querer llevar agua a su molino”, espetó.
Liliana Carbajal, Rene Oyarvide y José Antonio Lorca también subieron a tribuna, en un intento por equilibrar las cosas.
Sin embargo la que puso a todos en su lugar y los acabó evidenciando fue la diputada Gabriela Martínez, “son tal para cual”, les dijo y los remató, “tan malos unos cómo otros”, y arrancó los aplausos del respetable.
Al final, nada para nadie, y como siempre, los abrazos y besos coronaron la sesión que dejó muchas lecciones, entre ellas, que para tener la lengua larga hay que tener la cola corta.
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