¿Sabías que existen dolores que no tienen un origen físico, sino uno emocional? Cuando acudimos al médico por algún malestar y las pruebas para diagnosticar no arrojan alguna causa que este generando ese dolor estamos hablando de somatización o, en otras palabras, tu mente está expresando un malestar psíquico a través de un dolor físico.
Las dolencias por somatización son algo normal y ocurre más de lo que creemos, el cuerpo y la mente están conectados, cuando estamos pasando por un momento de mucho estrés, tensión o emociones muy intensas y no liberamos esta carga emocional, es cuando el cuerpo empezará a darnos señales de que hay algo que no está marchando bien, de cierta manera, el dolor físico advierte que hay trabajo emocional por hacer.
Pero ¿qué significa exactamente cada dolor? Aunque si bien cada cuerpo es capaz de expresar los malestares emocionales de forma distinta, hay dolores que pueden hablarnos de cosas específicas y a continuación veremos algunos ejemplos.
Dolor de cabeza, este padecimiento es la somatización en su máximo esplendor, ya que nos indica cansancio, ya sea por periodos prolongados de estrés y tensión o bien por toma de decisiones importantes, la solución en muchos casos es descansar, implementar rutinas de relajación al finalizar el día.
Dolor de hombros, este malestar está relacionado a una carga emocional que llevamos sobre nosotros, como la acumulación de emociones negativas o incluso problemáticas que no nos pertenecen, es importante que aprendamos como transmutar de manera saludable las emociones negativas que se producen diariamente, para no estar cargando con ellas hasta padecer algún malestar físico.
El dolor de espalda superior, este dolor nos indica que sentimos soledad y confusión por las situaciones que estamos a travesando, de alguna manera, no sentimos ese soporte que necesitamos, por eso se manifiesta este malestar.
Dolor de estómago, este dolor está asociado con aquellas emociones que son difíciles de entender, procesar o aceptar, cuestiones que son difíciles de digerir.
El dolor de rodillas suele relacionarse con la autoexigencia, te habla de que estas siendo demasiado exigente contigo mismo, trata de ser un poco más flexible y considerado.
El dolor de tobillos sin ninguna razón aparente puede referirnos a una falta de placer en tu vida.
Estos solo son algunos ejemplos, sin embargo, debemos de entender que el cuerpo somatiza nuestras emociones, dificultades o problemáticas, debido a que no estamos trabajando sobre ellas de forma consciente, no es necesario que adquieras una enciclopedia en donde te digan que significa cada uno de tus dolores, lo que realmente es necesario es volvernos conscientes de nuestras emociones, trabajarlas de manera saludable, soltar cargas ajenas e intentar trabajar en nuestra inteligencia emocional y autoconocimiento.
Nadie ha nacido sabiendo controlar y transmutar sus emociones, incluso una persona adulta y con experiencia puede llegar a tener dificultades en el reconocimiento y trabajo de sus emociones, sin embargo, es importante que todos sepamos que este tipo de procesos se pueden trabajar en terapia, y con la ayuda de un profesional conocerte más a ti mismo y conocer diversas técnicas que te ayudaran a mantener la calma o deshacerte de aquellas emociones que ya han cumplido su función en ti.
Estefanía López Paulín
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