En entrevista para Código San Luis, Enrique Torres, director general del Interapas, reconoce que sabía que “el Interapas era una papa caliente, pero no tanto”, no obstante, y a pesar de todas las adversidades, trabaja junto a un equipo de expertos para que San Luis Potosí no sea otro Monterrey y porque su misión, aquí, es poner orden adentro y afuera con el objetivo de que los potosinos tengan agua segura siempre.
En tono franco, dijo que, en efecto, ellos también recibieron una herencia maldita y un organismo que comparte responsabilidad con la Comisión Estatal del Agua, la Comisión Nacional del Agua y Aguas del Poniente, una concesión que explotan particulares.
Hace ocho meses, cuando llegó, su primera encomienda fue poner orden en la casa; Interapas tenía mil 140 empleados, era un aparato obeso e inoperante porque el personal administrativo rebasaba por mucho al técnico y operativo, tan es así que, por ejemplo, encontró a una enfermera haciendo labores de abogado en el área jurídica, donde también descubrió una mafia que arreglaba los problemas legales. Muy listo, el titular litigaba desde su despacho.
Su misión más importante, sin embargo, es hacer lo necesario para que los potosinos tengamos agua garantizada siempre, porque nadie quiere que se cree una nueva versión de Monterrey, donde se sufre una gran escasez al grado de que un garrafón de agua cuesta 160 pesos.
Consciente de su circunstancia, advierte que el Interapas no puede resolver en contra de decisiones políticas, esto, en alusión a la solicitud de aumento a la tarifa que le fue negada en el Congreso del Estado, lo que ha obligado a hacer más eficientes los mecanismos de cobro como el programa Cuenta Nueva y Borrón.
El Realito
Antes de que esta nueva administración tomara el control del Interapas, el ducto de El Realito se tronaba cada tres meses, ahora se truena dos veces al mes. Piensa mal y acertarás, parece ser lo que cree Enrique Torres en lo que no sólo se ve como un sabotaje, sino como una burla a las autoridades de la CEA que no atina a meter en cintura a la empresa Aquos, responsable de la operación del ducto.
Cada vez que se revienta El Realito, los potosinos se quedan sin agua, responsabilizan al Interapas y exigen sanciones que nada más no llegan, pero Torres asegura que, con el nuevo titular de la CEA hay buena comunicación y, con el de CONAGUA, Joel Félix Díaz, un entendimiento técnico y profesional de primera.
La Junta de Gobierno del Interapas ya trabaja para resolver de fondo la situación de El Realito, lo que permitiría, además, darle mantenimiento a la planta de Los Filtros, que es la que, actualmente, asume una gran parte de la responsabilidad para abastecer de agua potable a los potosinos.
