El terminar una relación puede ser un proceso muy difícil, ya que representa olvidar y empezar con una nueva “forma de vida”. Las personas no eligen enamorarse, así lo describe la frase “el amor no se planea, llega”. Lo anterior puede ser cierto, pero también se tiene que alimentar y construir. Cuando ya no estás en una relación sana o el sentimiento ya no es el mismo, lo mejor que puedes hacer es seguir adelante y luchar por superarlo.
El amor no es solo un sentimiento, sino también un proceso biológico. Cuando una persona se enamora libera dopamina, la sustancia conocida como la hormona del placer. La UNAM señala que gracias a este componente, las personas se siente muy feliz al amar, pero el problema viene cuando llega el fin de la relación.
Para superar una relación, especialistas en psicología destacan que es importante pasar por distintos procesos, los cables son los siguientes:
Aceptar la realidad: a estar enamorados las personas tienen a solo mirar un lado positivo, está nubla la vista y hace que se aferré a la idea de que todo puede cambiar. Aquí es cuando se debe de tener en mente que el amor se acabó, así poco a poco se comprende que es mejor marcharse.
Ser sincero contigo: al estar en una relación es común que ambos accedan a cambiar aspectos de su vida, pero si notas que no hay una diferencia en tu pareja es mejor que te preguntes que es lo que realmente quieres y si estás cómodo en la actualidad.
Darte un tiempo: al identificar que estás mal y querer en tu vida, necesitas de un espacio para ti, esto ayuda reconocer tus sentimientos y procesar lo que estás viviendo.
Mirar hacia adelante y recuperar tus relaciones: cuando una relación no funciona es mejor que te vayas, así no pones en riesgo tu futuro y buscas lo mejor para ti. También es importante que recuperes las cosas que antes realizabas y te hacen sentir feliz, como el salir con tus amigos, familia o compañeros de trabajo. Después de una relación tóxica, lo mejor es rodearte de personas que quieren lo mejor para ti.
