Arte (destacadas)ARTE, OCIO Y MODA

Invitan a la obra «Van Gogh, un girasol contra el mundo»

En 2019 y a principios de 2020 Mario Iván Martínez escribe y produce la puesta teatral, Vincent, girasoles contra el mundo donde encarna a los hermanos Van Gogh, bajo la dirección de Luly Rede. Dicho montaje realizó funciones en los teatros Helénico y Libanés de la Ciudad de México en contubernio con los actores Paula Comaduran y Fernando Memije. Surgió de haber prestado su voz al documental Vincent, pinceladas de un genio producido por el Museo Van Gogh de Ámsterdam, el Museo de Orsay de París y el Centro Cultural Tijuana.

En 2021 y en el contexto de la pandemia mundial ocasionada por el COVID-19,  Mario Iván decide dar seguimiento a esta experiencia desarrollando una versión para actor solista, sobre su propia dramaturgia basada en el pintor neerlandés. Dicha propuesta unipersonal existe en formato de transmisión en línea y a partir de octubre 2021 está disponible de manera presencial.

Van Gogh, un girasol contra el mundo pone al descubierto la personalísima relación de un actor mexicano con una de las más recias personalidades de la pintura. En esta variación unipersonal sobre su texto original, Mario Iván Martínez hurga e insiste en los encuentros y desencuentros ocurridos en la vida misteriosa, fascinante y turbulenta de este genio de la plástica moderna.

Este trabajo escénico se ubica durante el año de encierro voluntario del pintor en el hospital psiquiátrico de Saint-Rémy en la región provenzal francesa. Aquí, el  creador de La noche estrellada rememora los encuentros y desencuentros de su vida así como la conmovedora, casi umbilical relación que prevaleciera con su hermano menor Theo, amigo y mecenas y la catártica confrontación que Van Gogh tuviese con el pintor Paul Gauguin. En el encierro se palpa también la necesidad que el neerlandés tiene por sobrevivir contra viento y marea, a través del pincel. Aquí hablamos de un periodo de enorme productividad para el artista, quien por fin consolida un estilo que potencia día con día. En Saint- Rémy su producción es vasta, cada vez más fascinante; el Van Gogh de este retrato escéncio es también el de un artista signado por la calma que otorga la reclusión monástica.

En Saint-Rémy Vincent nos muestra aspectos de dos mundos: el del encierro y el de la locura con pasillos interminables y laberínticos y otro, el de los recuerdos y los remordimientos, el del mundo exterior, en veces apacible y pastoral, pero siempre poseedor de una fuerza magnética que invita a la fuga y a la creación, a través de la estética más personal, enigmática y poderosa.

Seguiremos informando

Botón volver arriba