¿Existe vida después de la muerte? Esta es probablemente una de las preguntas que preocupa a más de uno, esto porque siempre se ha vendido la idea de que existe la rencarnación o un paraíso. Algunas historias que se han hecho virales, señala que si es posible el volver al mundo, pero, con un cuerpo y vida muy distinta. Si tú tienes la duda sobre si a ti te pasó esto, te enseñaremos una técnica que supuestamente ayudan a recordar tu vida pasada.
Lo primero que debes de realizar es encerrarte en tu cuarto, es importante que en la habitación no exista alguna fuente de sonido. El clima también es otro factor, por lo que debes de optar por un clima cálido, que no sea tan caluroso ni tan frío. Después de esto busca sentarte o acostarte en un lugar tranquilo, procura que ninguna persona llegué a interrumpirte. Además de esto busca el no tener en la mente nada, también evita el tener hambre o alguna sensación de ir al baño, de lo contrario el proceso no funcionará.
Cierra los ojos y ponte cómodo. Acuéstate boca arriba, coloca las manos a los lados y envuélvete en una luz protectora, seguido de esto deberás de:
- Imagina una luz blanca que te envuelve por completo. Visualízala brillando sobre tus pies, piernas, rodillas, caderas, torso, brazos, cuello, cara y cabeza. Esta luz blanca te protegerá de toda influencia negativa. Representa amor, bienestar e iluminación en forma de una bruma deslumbrante que te envuelve, que te ampara con su brillo, protegiéndote de cualquier mal.
- Imagínala. Siente su calor e invítala a que se derrame sobre ti. Repite en tu mente o verbalmente: Estoy inhalando una energía protectora poderosa. Esta energía crea un aura de protección a mi alrededor. Esta aura me protege todo el tiempo contra todo.
- Repítelo cinco veces por cada cinco inhalaciones. Luego concéntrate en visualizar y sentir la energía, haciéndola cada vez más brillante y poderosa. Repítelo con cualquier otro color que te venga a la mente hasta que te sientas listo para el siguiente paso.
Ahora tocará el empezar el viaje para ello deberás de imaginar un pasillo y después has lo siguiente:
- Tu pasillo puede estar adornado con filigrana de oro, puede ser como una catedral gótica, toda hecha de piedras preciosas, o como un bosque frondoso, lo que tú escojas.
- Cualquiera que sea el pasillo que crees en tu mente, úsalo cada vez que vayas en busca de una vida pasada. Imagina este pasillo con la expectativa de que cuando llegues al final, cuando alcances la puerta grande y gires la perilla, descubrirás una vida pasada.
- Camina por este pasillo. Haz que cada paso que des tenga un propósito. Imagina que tus pies tocan el suelo, visualizando todos los aspectos de tu viaje a medida que te acercas a la puerta grande: los sonidos de tu entorno, el color de la luz, incluso el «olor» de lo que te rodea
- Cuando llegues al final (cuando sientas que estás listo, ni un minuto antes), agarra la perilla de la puerta. Visualízate haciéndolo, sintiendo la textura de la perilla y el sonido del mecanismo cuando la giras. Cuando se abra el cerrojo, respira hondo y empuja la puerta con suavidad.
- Dale la bienvenida a una vida pasada. Acepta lo primero que veas al otro lado de esa puerta como algo de tus planos de existencia anteriores.
- Puede ser algo tan abstracto como el color amarillo o tan claro y vívido como un niño muy querido acunado en tus brazos. Considera cualquier cosa que veas como la base y construye sobre ella. Siéntela. Aférrate a las imágenes en tu mente y ábrete a ellas, aceptando cualquier cosa que surja en tu mente.
- Tal vez descubras que el color amarillo se convierte en una alfombra. A medida que te adentras en tu visión, podrías notar que el amarillo representa a la luz del sol que se derrama sobre una alfombra. A lo mejor de pronto te das cuenta de que esa alfombra está en una casa en Londres… y así sucesivamente.
- Tal vez dudes de lo que ves, pero ten por seguro que estás recordando una vida pasada.