Previo al Día de la Candelaria que se conmemora este 2 de febrero, cientos de mexicanos buscan la vestimenta indicada para levantar al Niño Dios y muchos de ellos caen en trajes ridículos que son reprobados y considerados incluso como pecado por la Iglesia católica a nivel mundial.
Si bien la tradición marca que el vestido sea de color blanco o dorado, en los últimos años en el afán de ser protagonistas muchos mexicanos buscan un Niño Dios «diferente», con vestidos de futbolistas, caricaturas o simplemente ocurrencias.
Lo anterior ha causado el descontento de la Iglesia que en diferentes partes del país han expresado su reprobación por romper la tradición, una de ellas es la Arquidiócesis de México que comentó que el Niño Dios «no es un muñeco.La imagen representa a Jesús, el hijo de Dios hecho hombre y merece un especial respeto».
La Arquidiócesis destacó que «las vestimentas de equipos de futbol, charros o incluso la Santa Muerte son incompatibles con la fe católica y deben evitarse».
En San Luis Potosí la situación no es muy diferente. Algunos puestos ubicados en el Mercado Hidalgo en el Centro Histórico han tenido que adaptarse a la demanda de los potosinos y, al menos en su mayoría, el más solicitado es el Niño Dios Covid.
«El enfermero o el Niño Dios Covid son uno de los más pedidos, pero también nos piden unos que no tienen nada que ver y esos aquí no los manejamos. Solo tenemos el tradicional.», compartió la comerciante Elena en entrevista para Código San Luis.
El origen de la festividad del 2 de febrero o Día de la Candelaria se tienen en la religión judía, la cual obligaba a la mujer a esperar 40 días para presentar a su hijo en el templo de Jerusalén. Por ello, desde el 25 de diciembre (nacimiento de Dios), se cuentan los 40 días y se levanta la figura para vestirla en los respectivos nacimientos.
