India confirmó 159 mil 632 nuevos casos de COVID-19 detectados en las últimas 24 horas, en pleno impulso de la tercera ola de la enfermedad alimentada por la rápida propagación de la variante ómicron, al tiempo que las autoridades aumentan las restricciones.
Con los nuevos datos el total de casos desde el principio de la pandemia llega a 35.5 millones en poco menos de dos años, según los datos del Ministerio de Salud de India.
La velocidad con la que se expande la enfermedad en India es muy superior a las olas anteriores del virus, que en el pasado requirieron de meses para pasar la barrera de los 100 mil, pero en esta ocasión bastaron menos de dos semanas.
El Consejo Indio de Investigación Médica (ICMR), el principal organismo médico del país asiático, indicó esta semana que las metrópolis son los focos de mayor propagación, y que “ómicron es la cepa circulante predominante”.
El valor reproductivo básico (R0), que estima la velocidad con que una enfermedad puede propagarse en una población, se registró en 4 esta semana. De acuerdo a esto, cada persona con el virus activo ha contagiado a otras cuatro personas sanas.
Esto es casi el doble de la velocidad con la que se propagó el coronavirus durante la devastadora segunda ola de COVID-19, entre marzo y mayo pasado, que llevó a esta nación de mil 350 millones de habitantes a un pico de más de 400 mil contagios y más de 4 mil 5500 muertes por día.
En esta ocasión, las autoridades estiman que la enfermedad podría alcanzar su pico entre los 500 mil y el millón de enfermos cada 24 horas.
Varias regiones de India han aumentado las restricciones ante el temor de que un aumento de casos provoque también un aumento de las hospitalizaciones saturando la capacidad instalada de su frágil sistema de salud.
El gobierno de Delhi ordenó un toque de queda de fin de semana que entró en vigor la noche del viernes pasado y permanecerá vigente hasta las 5:00 del lunes.
El estado de Maharashtra prohibió las reuniones de más de cinco personas, el cierre de las escuelas y universidades, y limitará el uso del transporte público a solo personas vacunadas.
“Nuevamente nos encontramos en un momento en el que estamos luchando contra una ola de COVID. Sin discutir cuán peligrosa puede ser o no esta nueva variante, asegurémonos de la seguridad de los demás”, dijo en Twitter el jefe de gobierno de Maharashtra, Uddhav Thackeray.
Maharashtra, del que es capital la financiera ciudad de Bombay, ha sufrido como ninguna otra región de India el impacto del coronavirus, y sus habitantes han estado bajo un régimen de cierre, toques de queda y restricciones la mayor parte de los últimos dos años.
En India han muerto 483 mil 790 personas a causa del coronavirus, 327 de ellas en las últimas 24 horas.