Enorme desconfianza causó entre los clientes de diversas instituciones bancarias la presencia de agentes de corporaciones policiacas en las cercanías de cajeros automáticos y de las mismas sucursales pues, según señalaron, lejos de sentirse seguros, comenzaron a dudar del papel que realmente desempeñan los agentes, sobre todo, ante los rumores que los vinculan con grupos criminales y la comisión de infinidad de delitos en todo el estado.
Este martes, en varios municipios de la entidad, como sucedió en Ciudad Valles, se vio el despliegue de una cantidad importante de agentes de la Dirección de Seguridad Pública del Estado recorrieron las principales instituciones bancarias buscando un acercamiento con los ciudadanos con quienes compartían una serie de consejos y recomendaciones para evitar ser víctimas de la delincuencia, sin embargo, la iniciativa no fue muy bien recibida por parte de la población.
Las recomendaciones que daban los policías eran básicas; no aceptar ayuda de ninguna persona extraña para retirar dinero de los cajeros automáticos para evitar que les cambien las tarjetas bancarias, no transitar por calles desoladas o hacer retiros a altar hora de la noche, acudir acompañado si se es persona de la tercera edad o evitar contar dinero en público, entre otros tantos consejillos.
En un inicio, los cuentahabientes creyeron que en la zona se estaba cometiendo algún delito y que a eso se debía la presencia de los uniformados, sin embargo, cuando les explicaban el motivo de su presencia, lejos de calmarse, la desconfianza crecía todavía más pues, ahora, los civiles comenzaron a sentirse observados o espiados por los agentes.
Versiones de los ciudadanos apuntan a que, dada la poca confianza que se tiene en este tipo de instituciones y el repentino interés por atender este tipo de temas, les da la idea de que, en vez de protegerlos, pueden ser ellos mismos quienes les pongan el dedo para entregarlos a asaltantes que, ubicando bien a sus víctimas, puedan atacarlos con mayor precisión.
