La única intención de la presente serie de columnas es incordiar, no se pretende evaluar ni mucho menos calificar el trabajo de las personas que mencionaré. Y para empezar es preciso tener en claro que la institución cultural potosina se ha convertido en un asilo, pero no en uno de lujo a donde van las personas que han tenido éxito en su vida, sino a esos asilos hediondos y rancios donde los hijos ojetes dejan a sus padres o abuelos, si un asilo de asistencia pública, lo triste del caso que de por si ya es escandaloso es que se paga del erario y los viejitos dicen y hacen como que trabajan, se palmean la espalda entre ellos y festejan cada día seguir bajo el cobijo del erario publico. Un consejo: jubílense, retírense ahora que aun les queda dignidad, véanse en el espejo de Raúl Gamboa, que termino siendo un obstáculo, una resistencia al cambio generacional que nos solo era necesario sino imprescindible para el desarrollo cultural de San Luis Potosí.
Empezaré con una reliquia cultural:
1.- Armando Adame quién incluso llegó a ser Secretario de Cultura Interino, este personaje ha sido y es el responsable del fracaso potosino en cuanto al fomento a la lectura, a servido solo como facilitador de sueldos del rancio grupo literario potosino, comandado en su momento por el difunto escritor David Ojeda quién junto a su esposa Laura Elena, Jorge Humberto Chávez y el pequeño grupo que cabe en cada presentación de sus proyectos personales en la Casa López Velarde (no caben mas de 15 personas), han empobrecido y obstaculizado el ejercicio literario en San Luis, no hay nuevos cuadros, no hay talleres vigentes, no hay estrategias para incentivar a los creadores literarios y del fomento a la lectura ni hablar, en lugar de estar arranado en su pocilga de oficina debería estar en los municipios, en las colonias, debería haber una estrategia formal con mediciones con rendición de cuentas, no ocurrencias ni pulguientas ferias de libros que lo único que logran es ahuyentar en lugar de generar lectores.
2.- Eudoro Fonseca, primero es necesario contextualizar, cuando este sujeto fue presidente del Instituto de Cultura de San Luis, le tocó como gobernador un Silva Nieto que le enjareto a su sobrino consentido Armando Herrera, en aquellos tiempos un vigoroso antropólogo cultural lleno de ambición y deseos por conocer y difundir la cultura potosina, el Dr. Fonseca se convirtió en su mecenas y mentor (a costa del erario claro esta) pagó todos sus viajes, tertulias, investigaciones y ocurrencias a cambio claro esta del completo apoyo del gobernador a las acciones y ocurrencias del sr. Fonseca. Dicho lo anterior y cumpliendo aquello de que favor con favor se paga, ante la estrepitosa salida del CEART de la Sra. Laura Elena y sabiendo que a la llegada de la 4T le quitaron la beca a don Fonseca y estaba en el desempleo en su lugar de residencia que es Aguascalientes, le regreso el favor poniéndolo al frente del CEART. Es importante señalar que no podemos hacer responsable del fracaso del CEART, de los escándalos de robo de piezas y obras resguardadas, de la pírrica cantidad de alumnos, de la discrecionalidad de los arrendamientos y tampoco de la inexistente animación cultural en tan ambicioso espacio, sin embargo, sí, de ser cómplice al callar todas las anomalías y hacer caso omiso y todo por un cochino y roñoso salario. Que falta de ética, de moral, de respeto así mismo, debería darle vergüenza. No denunciar lo hace cómplice de la inmoral opacidad de ese lugar. Y de su escandalosa salida del desaparecido Conaculta mejor ni hablamos.
3.- Laura Elena González todo un caso, lugar por donde ha pasado ha dejado un tufo pestilente de dudas, incongruencias, favoritismos, indolencia, arbitrariedad, mezquindad y mucha soberbia. Especialista en crear élites de intocables, la señora se cree de alto pedorraje se considera superior a la inferior clase burócrata de la cultura, así fue su paso por el IPBA donde dejó demandas sin resolver por maltrato, un grupo de sindicalizados se postraron durante meses a las afueras de su oficina a manera de protesta, en su cargo municipal siempre infló cifras para hacer lucir su mediocres eventos, en el CEART instauró un infranqueable equipo que aún perdura y mangonea al actual director Eudoro Fonseca, la administradora Eloísa un oscuro personaje que dicta las verdaderas órdenes en el CEART , Alejandra Elías interina cómplice y soldado fiel de la señora, un tipo de apellido Barbosa a quién colocó antes de irse como director académico y le puso un sueldo de 60 mil pesos que solo pudo disfrutar por un mes y el cuarto personaje de esa jauría amaestrada que tiene acorralado al pusilánime del Dr. Fonseca es el señor Tapia en el Polivalente proyecto que se adjudica como propio la señora por cierto.
Para poder ser directora del CEART el decreto exigía como mínimo una licenciatura, ni tarda ni perezosa la señora le pidió a su amiga la dueña del Centro de Estudios Culturales Magdalena Sofía Barat le diera el título que ostenta como diseñadora de interiores. Ojo y esto es muy importante, la señora fue impuesta por Enrique Márquez Jaramillo en el CEART amigo y compañero de borracheras de su difunto marido David Ojeda (quién por cierto siempre gozó de becas por todos lados, al señor le pagaba el IPBA, le pagaba el CEART y le pagaba Adame a través de Casa López Velarde y todo eso al mismo tiempo por talleres que ni daba porque o estaba borracho o estaba enfermo, se tenía que decir y se dijo, aunque les duela), cuando llega la 4T a México el señor Márquez Jaramillo se va a Cultura de la Secretaria de Relaciones Exteriores con Marcelo Ebrard e invita a la Señora Laura Elena a que le hiciera la chamba, pues que creen la corrió al año de estar allí por atribuirse funciones que no le correspondían fiel a su estilo, LO INCREIBLE EN ESTE PUNTO ES QUE NO HIZO ENTREGA RECEPCION AL SALIRSE DEL CEART, así como lo leen la señora se pasó por el arco del triunfo toda la normatividad existente, y obvio ustedes dirán bueno la contraloría la sancionó y esta inhabilitada pues no, todavía se dió el lujo de decir que ella impuso a Cecilia Padrón en Cultura Municipal, aseguró que Xavier Nava le había pedido que le propusiera a alguien para ese cargo, cuando todos sabemos que la Arquitecta Padrón llegó por ser la esposa del mejor amigo de Sebastián Pérez Secretario General del Municipio. Sin duda es una mujer peligrosa, ventajosa y un verdadero estuche de monerías.
4.- Enrique Villa. La lista es interminable de estos septuagenarios de la cultura potosina así que solo hablaré de uno más el INTOCABLE Enrique Villa, ustedes saben quién es, lo han visto alguna vez, el señor ni vive aquí para empezar. Este señor ha convertido en Mausoleo en lugar de Museo al Federico Silva, como un tétrico cuento de misterio este lugar solo se abre cuando inauguran una exposición y luego desaparece ya no existe, se desvanece, el señor ni va, ni hace juntas de gobierno, se pasa por sus huevos todas las indicaciones del secretario de cultura, el solo obedece a la momia mayor al nonagenario escultor chilango Federico Silva. Sin duda un terrible gestor con nula empatía por el museo, la comunidad potosina y todo lo que ello implique, todos se la pelan, el señor es intocable, no hace nada y cobra muy a gusto cada quincena.
Existe un adagio popular mexicano si fue pendejo de joven, será pendejo de viejo, el tiempo no da sabiduría, solo experiencia, no porque la momiza se las de mucho tiempo aplanando las almorranas en las oficinas burocráticas de gobierno, no significa que sean buenos gestores o que saben del quehacer cultural. Nos leemos pronto, si los incomodé o consideran que dije algo falso o erróneo repliquen en este medio, estoy seguro que les abrirán el espacio, ojalá me puedan callar el hocico, de todo lo que dije no tengo pruebas, pero tampoco dudas.
ki ki ri kí…
