Un grupo de ejidatario de diversos núcleos agrarios de Villa de Reyes, Villa de Arriaga, Mexquitic de Carmona y la capital potosina se reunieron para denunciar despojo de tierras por parte de SEMARNAT con el pretexto del nombramiento como área protegida a la Sierra de San Miguelito.
Los afectados señalan que la dependencia pretende despojarlos de por lo menos 100 mil hectáreas para la formación del área protegida, pese a que en este espacio residen familias o es la fuente de ingreso para comunidades enteras.
Dentro del nuevo lineamiento no se contempló la opinión de los ejidatarios, a quienes se les arrebatarán tierras sin importar su postura u opinión sobre ello. Los representantes de las comunidades también señalan la pérdida de empleos y fuentes de ingreso que este nuevo y mal organizado nombramiento traerá.
“En Escalerillas cientos de familias dependen de la explotación y trabajo de la cantera, desde tiempos ancestrales mucha gente ha vivido de este oficio artesanal y el perímetro que impone la SEMARNAT impedirá que se desarrolle esta fuente de empleo”, indicaron.
Los inconformes señalaron que están a favor de nombrar área protegida a la sierra, pero que se deben tomar en consideración factores mas allá de intereses particulares ya que se afectará tanto a las familias de la región como al turismo.
Durante rueda de prensa reiteraron que su organización cuenta con estudios científicos del COLSAN y Copocyt, donde personal capacitado y experto en la materia plantea otras estrategias para delimitar el área protegida, así como las actividades que beneficias o generan un daño real para el ecosistema del lugar.
El dirigente reiteró que detrás de los planes de expropiación de sus tierras, se encuentran intereses de grandes inmobiliarios que buscan invertir en áreas protegidas, para convertirlas en zonas residenciales de alta plusvalía, «porque si nuestras tierras en estos momentos por tener aún un uso de suelo agrícola, ganadero y de la pequeña minería, como área protegida aumentaría de manera exponencial la plusvalía de las tierras, beneficiándose los grandes constructores con la especulación de la propiedad de la tierra.
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